La Ciudad de México, no solo es un centro recreativo e histórico, sino también un crisol de culturas y tradiciones. Detrás de sus imponentes edificios y monumentos históricos, se encuentran las colonias que dieron forma a la ciudad y albergaron a sus primeros habitantes.
Más que una colonia, un patrimonio
La colonia San Rafael se destaca como uno de los rincones más antiguos de la Ciudad de México, según varias fuentes, incluido el Fondo Mixto de Promoción Turística del Gobierno de la Ciudad. Esta área ha sido considerada la más antigua y ha sido declarada Zona Patrimonial por la UNESCO debido a su rica cultura, teatros, arte, escuelas, danza, tianguis y su ubicación estratégica cerca de las principales avenidas.
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Inaugurada en 1859 como colonia de los Arquitectos, se llamó así destinada a los estudiantes de arquitectura de la Academia de San Carlos. No fue hasta 1891 que se le dio el nombre actual de San Rafael.
La colonia atrajo a familias de diversas clases sociales desde sus inicios, reflejando la marcada brecha social de la época con mansiones lujosas y casas más modestas o vecindades habitadas por personas menos privilegiadas.
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Un barrio en constante evolución
A pesar de su legado histórico, San Rafael ha sabido evolucionar con el tiempo, adaptándose a las nuevas necesidades de la ciudad sin perder su esencia. Hoy en día, la colonia es un centro cultural vibrante, con una gran variedad de restaurantes, cafés, bares, galerías de arte, librerías y tiendas que ofrecen una propuesta diversa y atractiva para visitantes y residentes.
Un legado que perdura
San Rafael es un símbolo de la historia de la Ciudad de México, un lugar donde el pasado y el presente se encuentran en perfecta armonía. Es una colonia que invita a descubrir sus tesoros escondidos, a disfrutar de su ambiente bohemio y a vivir la cultura en cada rincón.
Ven a descubrir San Rafael, la colonia más antigua de la CDMX, y déjate cautivar por su encanto atemporal.