Este miércoles el pleno del Congreso capitalino aprobó un dictamen que consideró 11 iniciativas para actualizar la Ley de Protección a los Animales de la Ciudad de México.
De esta forma quedan establecidos en la legislación los conceptos de bienestar animal, tutela responsable, paseador de perros, entre otros.
Al exponer el dictamen, la diputada local del Partido Acción Nacional, Ana Villagrán destacó que otros puntos que se contemplarán en la ley son: la eutanasia, método que debe aplicarse con diagnóstico previo de un especialista para evitar el sufrimiento animal cuando no puedan ser aliviados y no por un tema de austeridad.
Asimismo la legisladora refirió que se prohíben las peleas de gallos y espectáculos con animales, con excepción de las corridas de toros.
“Aquí decir que la eutanasia nunca puede ser utilizada como una medida de austeridad o simple y sencillamente de abandono animal, entiéndanlo así, la eutanasia es lo último que se tiene que aplicar como medida de control en una ciudad o en cualquier alcaldía, por lo que simple y sencillamente será avalada por las condiciones que ya señalamos. Que se prohíban las peleas de gallos y la celebración de cualquier espectáculo con animales en la ciudad de México y esto es aplicable a Pueblos y Barrios originarios, porque primero es la vida de los animales”, expuso.
La panista agregó que la actualización de la Ley de Protección a los Animales incluirá la obligatoriedad de inscribir a animales de compañía, derivado no sólo de la adquisición sino también de la adopción, en el Registro Único de Animales de Compañía de la Ciudad de México (RUAC), además de que deben portar de manera obligatoria un collar o pechera que tenga sus datos de identificación.
Durante la discusión del dictamen, diputado de Movimiento Ciudadano, Royfid Torres presentó una reserva para quitar la excepción de maltrato animal a las corridas de toros, la cual fue desechada.
Al respecto, el ecologista Jesús Sesma lamentó que por temores e intereses políticos, económicos o de otra índole no se ha avanzado en la prohibición de la llamada fiesta brava.
Con 48 votos a favor, cero en contra y cero abstenciones, fue aprobada en el Congreso de la Ciudad de México la también llamada “Ley Maple”.