JUSTICIA

Madres y familiares de desaparecidos marchan en CDMX: 'Perdón nunca'

Los manifestantes exigen un alto a la impunidad y castigo a los responsables de estos crímenes.

Los familiares llegaron al Ángel de la Independencia.
Los familiares llegaron al Ángel de la Independencia.Créditos: Nora Bucio
Escrito en NACIONAL el

“Perdón nunca, olvido jamás”, enarbolaron las madres y familias de las 112 mil 227 mil personas desaparecidas en México como slogan de la XII Marcha de la Dignidad Nacional, Madres Buscando a sus hijos e hijas.

Como cada año, las mismas pancartas, los mismos casos que no avanzan y sus familias siguen sin aparecer. Por ello salieron a marchar desde el Monumento a la Madre hacia en Ángel de la Independencia, para exigir alto a la impunidad y exigir castigo a los responsables de estos crímenes de lesa humanidad.

Guadalupe Fernández Martínez, integrante de Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos dijo que familias mexicanas y extranjeras se hicieron presentes para denunciar este crimen de estado y la tragedia humanitaria de desapariciones que parece no tener fin.

Los discursos y testimonios se sucedieron como cada 10 de mayo, que el Estado no cumple con su obligación de búsqueda, que la Fiscalía General de la República (FGR) no quiere participar ni cumplir con la construcción del Banco Nacional de Datos Forenses.

Mientras tanto, Yolotzin y Citlali Millán, vinieron a marchar para exigir justicia por su madre Blanca Esthela, su abuelo Juan y su hermana Astrid, quienes desaparecieron desde enero del año pasado y a pesar de que habían sido asesinados y sepultados en su patio, el presunto asesino suplantó la identidad a través de su celular y les mandaba mensajes haciéndose pasar por ella hasta que encontraron sus restos en junio.

Crédito: Nora Bucio

Blanca Gómez viene desde El Salvador buscando a su hijo Luis Roberto Melgar, quien desapareció a su paso por México en 2010 y en 2013, su hermano Nelson Heriberto Gómez también desapareció al buscar llegar a Estados Unidos, en su país le negaron el apoyo y en México ha encontrado un muro de burocratismo y opacidad.

Las madres y las familias regresarán este día a sus estados, a Centroamérica o a los lugares donde desaparecieron los suyos para seguir rascando la tierra, observando cada rostro en la calle para ver si por milagro les reconocen.