Los jóvenes de la Ciudad de México salieron a exigir al gobierno de Claudia Sheinbaum y al que encabeza Andrés Manuel López Obrador, que saque a la Guardia Nacional del Metro.
Entre consignas contra la Jefa de Gobierno recriminaron la falta de mantenimiento a este sistema de transporte y la falta de medidas concretas para garantizar la seguridad de los usuarios mientras ella anda en campaña por el país buscando ser presidenta.
Amnistía Internacional denunció que a pesar de la labor de vigilancia que realizan los seis mil 060 elementos de la Guardia Nacional en las instalaciones del Metro aún se siguen presentando incidentes de seguridad que ponen en riesgo a los usuarios, evidenció Edith Olivares, representante de esta organización en México.
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La marcha que avanzaba detrás del contingente encabezado por Cesar Hernández, padre de Yaretzi, la estudiante universitaria que perdió la vida a causa del accidente en la Línea 3 del Metro, quienes portaban girasoles en memoria de la estudiante, se mantuvo respetuoso a su paso.
Sin embargo, un grupo de integrantes del bloque negro se enfrentó en varias ocasiones con elementos de la Secretaría de Seguridad Pública luego de que los jóvenes rompieron con martillos y tubos algunas vidrieras de bancos, hoteles y oficinas, además de realizar pintas en el mobiliario público.
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Frente a la glorieta de las mujeres que luchan, la policía encapsuló a los jóvenes y a los integrantes de la organización Marabunta, y después en varios minutos cuando les decomisaron estas armas, les permitieron seguir caminando junto con la marcha.
Al arribar estos contingentes exigiendo la salida de la Guardia Nacional de las instalaciones del metro y recriminando al gobierno esta medida que consideran excesiva, los grupos permanecían tranquilos y uno de jóvenes vestidos en negro, llegó hasta la fachada vallada de Palacio Nacional y lanzó algunos cohetones y encendió pequeñas hogueras, sin embargo, esta acción duró apenas menos de tres minutos.
Al finalizar esta acción el grupo se retiró corriendo, sin embargo dos señoras a gritos pedían a los “mexicanos” acercarse para defender al presidente López Obrador y al Palacio Nacional mientras que un grupo de jóvenes que habían avanzado en la manifestación se confrontaban verbalmente con ellas, en lo que podría considerarse una muestra de la polarización social en el país.
Cabe señalar que ninguno de los contingentes fue atendido por autoridades para escuchar sus demandas sobre la salida de este cuerpo militar del metro.