Un nuevo desencuentro se abre entre el gobierno capitalino y vecinos que desde octubre de 2021 se oponen al proyecto de renovación del Estadio Azteca, recinto que será remodelado con motivo de la Copa Mundial de 2026.
Apenas hace unos días la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum daba a conocer que prácticamente existía un acuerdo con los vecinos colindantes al llamado “coloso de Santa Úrsula”, pues se habían hecho varias modificaciones al proyecto, el cual dijo sería aprobado rápidamente, una vez que lo presenten los empresarios.
Sin embargo, “es falso” que haya consenso con los habitantes de Santa Úrsula, “los Pedregales” y Huipulco. Se trata de un “buscapie”, así lo dijo en entrevista con MVS NOTICIAS Rubén Ramírez, autoridad tradicional del Pueblo Originario de Santa Úrsula Coapa, quien advirtió que podría haber movilizaciones para defender a su comunidad.
“La realidad es el consenso, si no vamos a hacer movilizaciones para que entienda el gobierno encabezado por la doctora Claudia Sheinbaum que es la jefa de gobierno sí, pero no es la dueña de los pueblos. Entonces nosotros vamos a defender nuestro territorio, así como nuestros recursos naturales y en lo referente a que si quieren dialogar, estamos abiertos para eso”, declaró.
En este sentido Rubén Ramírez cuestionó la celeridad con la que el gobierno capitalino ha otorgado autorizaciones a este proyecto en materia hidráulica, mientras que las demandas de la comunidad han sido ignoradas por años.
“Hemos solicitado infraestructura hidráulica, de drenaje y no se nos ha hecho caso, entonces cómo va a ser posible que estos señores de la noche a la mañana soliciten un poso para un extracción de 1 millón 570 mil m³ de agua y los otorgue, eso no concuerda con nosotros, cómo es posible que a esas personas de la noche a la mañana se les atienda y nosotros que tenemos años luchando por ese líquido no se nos haga caso”, indicó.
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La autoridad tradicional del Pueblo Originario de Santa Úrsula Coapa refirió que siguen en espera de que el secretario de Gobierno Martí Batres se reúna con ellos, encuentro que estaba previsto desde el pasado mes de agosto.
Puntualizó que defenderán su lugar de residencia conforme a lo establecido en la Constitución, ante un proyecto que consideran amenaza con el agotamiento de agua, la saturación de vialidades, la vulnerabilidad del suelo y el aumento del costo de vida.