Luego de que ayer la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México aprehendió a tres ex trabajadores de la Secretaría de Administración y Finanzas por su probable participación en el desvío de más de 190 millones de pesos, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum descartó que se trate de una acción con fines políticos.
En conferencia la funcionaria aseguró que al tomar las riendas de la administración local su responsabilidad es denunciar las anomalías para no convertirse en cómplice.
Información relacionada: Por violación a una mujer son aprehendidos dos policías de SSC
"Nuestro objetivo es erradicar la corrupción y la jefa de gobierno no persigue a nadie, no es un objetivo político, no tiene absolutamente nada que ver con eso pero cuando un funcionario público recibe el gobierno en un acto de entrega-recepción, si ese funcionario público no presenta ante Contraloría las quejas o ante la Procuraduría también se hace cómplice de eso que se está recibiendo", puntualizó.
Sobre el presunto desfalco al erario público la mandataria capitalina agregó que éste se concretó en junio de 2018, un mes previo a las elecciones. "Ya la interpretación de las dejo a ustedes", acotó.
Dijo que la procuraduría investiga distintas irregularidades correspondientes a la pasada administración, incluso refirió que las anomalías están en prácticamente todas las secretarías, por lo que se ha dado visto a la contraloría.
"La Contraloría prácticamente en todas las secretarías tiene irregularidades que se presentaron de distinto tipo y requieren distintas sanciones, hay algunas que son sanciones administrativas y hay otras que se consideran que son sanciones penales que en algunos casos lo determina la propia contraloría general y en otros casos lo determina directamente el área que está encontrando la irregularidad", comentó.
Sheinbaum Pardo aseguró que la instrucción a todos los funcionarios es denunciar todas las anomalías, pues, advirtió, no asumirán responsabilidades que no les corresponde.