El candidato del PRI a la Jefatura de gobierno de la Ciudad de México, Mikel Arriola, se sometió a la prueba del polígrafo en el Instituto Latinoamericano de Poligrafía y al salir retó a sus contrincantes Alejandra Barrales y Claudia Sheinbaum a probar su honestidad a través del “detector de mentiras”, cuyo resultado se dará a conocer en las próximas 24 horas.
Según el aspirante del Partido Revolucionario Institucional (PRI), es un ejercicio de transparencia y es muy importante que la gente sepa “si nos conducimos o no con la verdad y el que se niegue a la prueba del polígrafo es contrario a la lógica de la verdad”.
Arriola Peñalosa es el primer candidato al gobierno de la ciudad en someterse a la prueba, que duró una hora 20 minutos. El abanderado priista dijo que se sintió muy bien al contestar preguntas sobre su situación patrimonial, cargos públicos y consumo de drogas, entre otros temas.
“El que no tenga miedo de contestar un polígrafo que venga y que se lo haga, es una hora, no le quita nada a nadie, atendimos a una petición de transparencia de una institución periodística que se dedica a informar”, agregó.
Ante representantes de medios de comunicación, declaró que la prueba promovida por el diario 24 Horas es un ejercicio de transparencia para que el electorado sepa si nos conducimos o no con la verdad.
Ante la pregunta sobre que Alejandra Barrales calificó como una pérdida de tiempo realizarse la prueba, Arriola Peñalosa afirmó que también es una pérdida de tiempo votar por ella porque alguien que no se quiere someter a un ejercicio de honestidad, entonces cómo pretende pedir el voto a la gente, “creo que tiene que ser algo que por voluntad se haga para abonar en la transparencia”.
En este sentido, el abanderado priista señaló que sus adversarias tienen miedo porque el examen implica por lo menos un elemento que nos hace presumir que no se han conducido con verdad, “Alejandra sobre su patrimonio y, por otro lado, saber si Claudia Sheinbaum cobró o no un ingreso de manera indebida como investigadora”.