La candidata al gobierno capitalino por el partido Nueva Alianza, Purificación Carpinteyro, anunció que se reunirá mañana con la aspirante de la coalición Por la Ciudad de México al Frente, Alejandra Barrales, para presentarle sus propuestas.
Explicó que el encuentro se llevará a cabo en un restaurante de esta capital, ya que Barrales Magdaleno ha sido la única que aceptó, hasta el momento, su invitación.
Recordó que también convocó a sus demás contendientes a un encuentro para presentarles sus propuestas y que éstas sean consideradas, sin importar quien gane los comicios el 1 de julio.
Carpinteyro Calderón resaltó que entre sus propuestas destacan la utilización de nuevas tecnologías para hacer de la capital del país una urbe inteligente, así como ahorrar 10 mil millones de pesos mediante el uso de energía solar.
Durante un evento de cierre de campaña de candidatos de Nueva Alianza a alcaldías y diputaciones, aseguró que no declinará por nadie y que trabajará hasta el último momento, y señaló que de no favorecerle el voto de los capitalinos, laborará con cualquier otro gobierno a excepción del que en su opinión, dijo, “es una fuerza retrograda”, sin mencionar ninguna fuerza política.
La candidata habló de la importancia que tuvo en su campaña el último debate de cara a las elecciones del 1 de julio próximo, en el que indicó tenía “que romper las reglas para llamar la atención”.
Aseguró que cumplió su cometido toda vez que de no ser ni siquiera conocida se convirtió en tendencia nacional e internacional en redes sociales y ahora “hasta se toman fotos” con ella, lo que según ella beneficiará al partido que representa y a los candidatos, sobre todo a aquellos con posibilidades de ganar la elección.
Respecto a los comentarios que consideraron su participación como agresiva, aseguró que no hizo nada que un ciudadano indignado no hubiera hecho al reclamar a la abanderada de la coalición Juntos Haremos Historia, Claudia Sheinbaum, su responsabilidad en el caso del Colegio Rébsamen, y en la poca transparencia que según ella hay en la construcción del segundo piso del Periférico cuando ella era secretaria del Medio Ambiente de la capital.
Vestida con un pantalón negro de piel, botas, blusa del mismo color y lentes obscuros, subió al escenario y aseveró ir disfrazada para dar gusto a los medios de comunicación a los que consideró “sus peores enemigos”, por querer caricaturizarla y no ofrecerle espacios para la difusión de sus propuestas.