La Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México expidió su protocolo de actuación en caso de sismo, a fin de asistir a la población con respeto a los derechos humanos.
Lo anterior, conforme a su responsabilidad de mantener el orden público, proteger la integridad física de las personas así como a sus bienes; prevenir la comisión de delitos e infracciones de los reglamentos gubernativos y de policía, colaborar en la investigación de los delitos y auxiliar a la población en caso de siniestros y desastres.
En un acuerdo emitido en la Gaceta Oficial, la dependencia reconoce la importancia de la actuación policial y de la necesidad de continuar las acciones de capacitación para contar con una policía con mayores aptitudes para proporcionar asistencia, protección y orientación a la población capitalina en un temblor.
Para la interpretación y aplicación del protocolo, precisó que se regirán bajo los principios rectores de congruencia, eficiencia, honradez, legalidad, objetividad, oportunidad, profesionalismo, proporcionalidad, racionalidad y respeto a los derechos humanos.
En el documento, vigente a partir de mañana, detalló que el protocolo será aplicado una vez que se perciba un sismo y/o se haya activado el Sistema de Alerta Sísmica.
Para ello, apuntó, los integrantes de la dependencia deberán tomar en cuenta que existen grupos de población o personas con mayor grado de vulnerabilidad debido a su origen étnico o nacional, género, edad, discapacidad, condición social, de salud, religión, opinión, preferencia sexual, estado civil u otra condición que pudiera atentar contra la dignidad humana o sus derechos y libertades.
Ello exige la aplicación de medidas especiales para evitar cualquier acto de discriminación o violencia contra estas personas para evitar la afectación desproporcionada de sus derechos, subrayó.
Indicó que la policía capitalina mantendrá coordinación y comunicación con los centros de Control y Comando, de Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano, así como de Tránsito de la Ciudad de México para atender las solicitudes de apoyo captadas por las diferentes frecuencias operativas.
Mencionó que la Oficialía Mayor será la responsable de coordinar la administración de los recursos humanos, financieros y materiales, servicios generales, mantenimiento y transporte de la Secretaría para la aplicación del protocolo.
A su vez, anotó, la Dirección Ejecutiva de Comunicación Social será quien lleve a cabo el procesamiento de la información que se proporcionará a medios de comunicación, así como del manejo de las redes sociales de la Secretaría.
Expuso que la dependencia contará en cada Dirección General de Zona con una agenda temática de mapeo en la que se encuentren las escuelas, los hospitales y servicios de emergencia, ductos y poliductos de hidrocarburos; refugios temporales y albergues, mercados, bancos y centros comerciales, entre otros sitios de alta concentración de personas.
Especificó que habrá una Sala de Crisis, que contará con el Directorio de Mandos Responsables y suplentes por Zona, Región, Unidades de Policía de Proximidad y Metropolitana, con número telefónico oficial, particular o cualquier otro medio de comunicación que permita su localización.
Detalló en el documento las funciones de las subsecretarías de Control de Tránsito, de Participación Ciudadana y Prevención del Delito, de la Jefatura del Estado Mayor Policial, de la Policía Complementaria, así como las acciones de atención y de apoyo a la población afectada.
Resaltó que la Policía de la Ciudad de México participará, posterior al sismo, en las labores de sanidad del área de afectación y en coadyuvar en la operación de los servicios de transporte durante el restablecimiento de las vías de comunicación.
Además, en seguir proporcionando seguridad en los servicios vitales e instalaciones estratégicas, así como en escuelas, hospitales, clínicas, estaciones del Metro, paraderos de autobuses, centros comerciales, mercados públicos, guarderías, oficinas administrativas, dependencias de gobierno y demás instalaciones que requieran el servicio.
En su protocolo, la Secretaría de Seguridad Pública capitalina dejó establecido aspectos como la movilización del área de afectación, del puesto de comando en sitio y la evaluación de la situación, de la respuesta a la emergencia, de la búsqueda y localización de personas.
Asimismo, agregó, prevé los procedimientos para el acceso, estabilización, extracción y traslado de la víctima de un sismo, hasta la fase de desmovilización, cuando termina la misión de la policía y la situación empieza a normalizarse.