Con 82 votos a favor, dos abstenciones y dos en contra, la Asamblea Constituyente aprobó en lo general el artículo 14 de la Constitución de la Ciudad de México que contempla los derechos a una vida digna y obliga a las autoridades a erradicar progresivamente las desigualdades y generar una justa distribución de la riqueza “hasta el máximo de los recursos públicos disponibles”.
También contempla el derecho al cuidado y acceso a servicios públicos y universales suficientes y de calidad, y que garantice la atención a personas en situación de dependencia, especialmente a niñas, niños, adolescentes, enfermos, personas con discapacidad.
Garantiza el derecho a la alimentación y a la nutrición saludable, con la creación de un organismo público que implemente políticas, así como el derecho a la salud, al más alto nivel posible física y mental, con las mejores prácticas médicas, lo más avanzado del conocimiento científico y activas políticas de prevención y calidad.
Además del derecho a la vivienda para sí y su familia, adaptada a sus necesidades como tamaño suficiente, diseño y ubicación.
Por último contiene el derecho al agua y a su saneamiento.