Luego de que el pasado 11 de junio se cumplió un mes de que el gobierno de Estados Unidos determinó cerrar su frontera al ganado mexicano debido a la presencia de gusano barrenador, la presidenta Claudia Sheinbaum reconoció las afectaciones a este sector y aseguró que su administración hace todo lo que está en sus manos para convencer al vecino país de que no existen problemas con esta plaga en el norte de México.
Busca México convencer a EU que es seguro reabrir frontera al ganado mexicano
En Palacio Nacional, la mandataria federal dijo que se trabaja en la frontera sur del país para evitar la propagación del gusano barrenador.
“Sí les está afectando, evidentemente, pues más esta prolongación, lo que tienen que saber es que estamos haciendo todo lo que esté en nuestras manos para que Estados Unidos se convenza de que no hay problema de contaminación del gusano barrenador en el norte del país, en los estados del norte que hemos tenido algunos episodios en el sur, y que estamos fortaleciendo la frontera sur, para evitar que pudiera haber alguna contaminación”, señaló.
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La titular del Ejecutivo agregó que el secretario de Agricultura, Julio Berdegué, está personalmente atendiendo el caso y recordó que se pactó con el gobierno estadounidense la instalación de una planta de moscas estériles, con una inversión de 21 millones de dólares que transferirán al gobierno mexicano.
“Está aquí el equipo de Estados Unidos, el secretario Berdegué está pegado a ello y lo que queremos pues es lo más pronto posible convencer de que no hay ningún problema con que se abra la frontera, entonces estamos trabajando en ello ese lo que tenemos que hacer y está en contacto permanentemente con las asociaciones ganaderas el secretario Berdegué y estamos esperando, pues que en efecto se convencen de ello, y además hemos pactado incluso el poner una planta con recursos que pondría Estados Unidos de esta mosca que ayuda a evitar la propagación del gusano”, explicó.
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Sheinbaum Pardo puntualizó que la reapertura de la frontera con Estados Unidos, es decisión del gobierno de Trump, y que lo que hace México es demostrar de manera técnica que no habría problema.
Además, indicó que los ganaderos estadounidenses son un aliado para que pronto se pueda reanudar el comercio, pues ya están sufriendo las consecuencias del cierre fronterizo en el norte del país.
“Es una decisión que depende de ellos, entonces nosotros lo que tenemos que hacer es demostrarle que no, en todo caso, no es un problema técnico, que no hay contaminación de gusano barrenador en la frontera norte de nuestro país, y que tiene que abrirse la frontera y tenemos un gran aliado, que son los ganaderos de Estados Unidos que ya están sufriendo las consecuencias en este, pues de esta situación, entonces ellos mismos quieren ya que se abra la frontera”, acotó.