Una decena de feministas que respaldan a Holy Yash, joven que denuncia haber sido víctima de violación por elementos del ejército en Chimalhuacán en 2019, se manifestaron en las instalaciones de la Secretaría de Gobernación donde realizaron pintas, se enfrentaron con policías y saltaron las rejas para tratar de encadenarse hasta ser recibidas por la titular Rosa Icela Rodríguez.
Dos mujeres con una bebé de meses pretendieron ingresar por la fuerza por la entrada principal en Abraham Gonzalez y quedaron en medio de los policías que resguardaban el lugar por varias horas; mientras que otras dos más, una de ellas, la madre de la víctima, saltaron las rejas por el área conocida como Las Caballerizas y permanecieron en el lugar hasta que funcionarias de Segob las convencieron de sentarse a negociar.
Irene, madre de Holy Yash, quien saltó la reja y protagonizó un conato de bronca con los elementos de seguridad a quienes incluso les arrebataron un escudo, entró a la mesa de diálogo, sin embargo después de más de tres horas adentro, salió a denunciar que esta se había cancelado por la ausencia de autoridades locales y federales que pudieran dar respuesta a sus exigencias de justicia.
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Aseguró además tener miedo de las represalias de los militares implicados porque comentó que ya en una ocasión le quemaron su casa porque ahí resguarda la lista con los nombres de los presuntos responsables, además acusó a la representación de la ONU en México de protegerlos.
Con la voz quebrada lamentó que después de estas instancias no haya más autoridades a quienes recurrir en busca de justicia para su hija que en el momento de la agresión contaba con 16 años.