Alejandra Cuevas Morán presentó una denuncia en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en contra del Estado mexicano por la “detención arbitraria y persecución institucional” que encabezó en su contra el titular de la Fiscalía General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero.
Cuevas Morán presentó la denuncia al cumplirse tres años de su liberación por mandato de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), luego de permanecer encarcelada por espacio de año y medio.
A través de un video que difundió en sus redes sociales, aseguró que la persecución fue impulsada por Gertz Manero, quien utilizó su cargo para llevar a cabo una “venganza personal” con respaldo institucional.
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“Fui privada de la libertad no por cometer un delito, sino por representar una amenaza simbólica para quien detenta el poder. Mi encierro no fue un error ni una omisión, fue un acto deliberado, ejecutado con precisión, por instituciones que traicionaron su mandato constitucional y se pusieron al servicio de la venganza”.
La mujer dio a conocer que tras su liberación, ella y su familia abandonaron el país, marcados por el miedo, el desarraigo y la sensación de que su libertad sigue siendo condicional.
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“Este caso es un espejo de lo que puede suceder cuando el sistema de justicia se convierte en arma del poder político. No es sólo una historia mexicana, es una advertencia continental sobre los riesgos de la impunidad, la manipulación judicial y la persecución disfrazada de legalidad”..
Alejandra Cuevas es hija de Laura Morán Servín, quien estuvo casada con Federico Gertz Manero, hermano del titular de la FGR. Tras el fallecimiento de su cónyuge, Cuevas Morán enfrentó un proceso por el presunto delito de homicidio por omisión por comisión y estuvo recluida en el penal femenil de Santa Martha Acatitla, la que abandonó el 28 de marzo de 2022.