La Fiscalía del Estado de Jalisco formalizó este martes la imputación contra los integrantes de Los Alegres del Barranco, su representante y su promotor, por el delito de apología del delito, luego de que durante un concierto en el Auditorio Telmex proyectaran imágenes de Nemesio Oseguera Cervantes, "El Mencho", líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

¿Cómo comenzó la polémica?
El escándalo estalló el 29 de marzo, cuando la agrupación interpretó los narcocorridos "El del Palenque" (dedicado a "El Mencho") y "701" (en honor a "El Chapo" Guzmán), mientras en pantallas gigantes se mostraban imágenes del líder del CJNG. Las grabaciones del concierto se viralizaron, generando críticas por la glorificación del crimen organizado.
La controversia escaló hasta que, el 4 de mayo, el municipio de Tequila, Jalisco, canceló su presentación programada en la Unidad Deportiva 24 de Enero. El alcalde Diego Rivera Navarro justificó la decisión alineándose con la postura del gobernador Pablo Lemus y la presidenta Claudia Sheinbaum, quienes han rechazado cualquier forma de enaltecimiento del narcotráfico.
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Disculpas públicas y medidas legales
Frente a las críticas, la banda emitió un comunicado de disculpa el 2 de abril, reconociendo que su presentación pudo ser "percibida como ofensiva".
"Reconocemos que, como artistas, tenemos una gran responsabilidad frente a nuestras audiencias, especialmente con las nuevas generaciones", declararon.
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Sin embargo, un nuevo capítulo marcó la carrera de este grupo, ya que en su más reciente presentación tocaron los instrumentos e invitaron al público a cantar, sumando más detalles a lo que las autoridades ya habían iniciado: una investigación que culminó con su imputación formal.
¿Qué pasará con los Alegres del Barranco?
El caso de Los Alegres del Barranco marca un precedente en la lucha contra la apología del delito en el entretenimiento. Si el juez determina su vinculación a proceso en la audiencia del 12 de mayo, la banda y su equipo podrían enfrentar:
- Proceso penal por apología del crimen organizado, con posibles multas y restricciones artísticas.
- Mayor escrutinio en futuros conciertos, con riesgo de más cancelaciones por presión gubernamental.
- Impacto en su carrera, ya que promotores y patrocinadores podrían distanciarse para evitar polémicas.
Sin embargo, si logran negociar un acuerdo o la Fiscalía no sustenta suficientes pruebas, podrían salir libres, aunque su imagen ya quedó manchada.
Una cosa es clara: Las autoridades de Jalisco están enviando un mensaje contundente: la glorificación del narcotráfico no será tolerada, ni en la música ni en ningún otro espacio público.