La violencia contra periodistas en México alcanzó uno de sus niveles más críticos en 2025, según el balance anual de Reporteros Sin Fronteras (RSF). En entrevista para MVS Noticias, Balbina Flores, representante de la organización y defensora de derechos humanos, advirtió que el país volvió a ubicarse entre los más peligrosos para la prensa debido a la escalada de asesinatos, la impunidad y la persistente falta de protección institucional.
En 2025 nueve periodistas fueron asesinados en México
De acuerdo con el informe de RSF, en México se registraron nueve periodistas asesinados directamente por su labor informativa durante 2025. Flores explicó que estos casos cuentan con elementos que confirman su vínculo con la actividad periodística, aunque no se descarta que existan más crímenes en proceso de investigación.
En la mayoría de los casos se identificó la participación del crimen organizado, así como posibles vínculos con actores políticos locales, lo que agrava el panorama de impunidad.
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Impunidad y falta de protección institucional
Uno de los principales hallazgos del informe es que la violencia contra periodistas en México 2025 se mantiene principalmente por la falta de justicia. La representante de RSF señaló que la ausencia de investigaciones sólidas, la falta de castigo a los responsables y el debilitamiento de los mecanismos de protección permiten que estos crímenes sigan ocurriendo.
México acumula más de dos décadas con altos niveles de agresiones contra la prensa, sin que los cambios de gobierno logren revertir esta tendencia.
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Discurso político y nuevas formas de presión
Balbina Flores reconoció que, a nivel federal, el discurso hacia los periodistas ha disminuido en tono, especialmente con la llegada de la presidenta Claudia Sheinbaum. Sin embargo, advirtió que a nivel estatal y municipal persisten los discursos de odio desde el poder.
A nivel global, Reporteros Sin Fronteras documentó que algunas regiones, como Gaza, concentraron una parte significativa de los asesinatos de periodistas debido a conflictos armados. No obstante, en América Latina, México se mantiene como uno de los focos más alarmantes en materia de seguridad para la prensa.