En una sesión privada, la mayoría de los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nacional (SCJN) resolvió sumarse al paro en el Poder Judicial Federal.
Un total de ocho ministros votaron por iniciar el paro, mientras que solo tres votaron en contra.
Tras esta resolución, las ministras Yasmín Esquivel Mosa, Loretta Ortiz y Lenia Batres emitieron un pronunciamiento conjunto donde rechazan la paralización de las actividades en el máximo tribunal del país.
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Al citar el artículo 109, fracción I, de la Constitución, las ministras advirtieron que procede la destitución del cargo y la inhabilitación a las ministras y ministros que en ejercicio de sus funciones “incurran en actos u omisiones que redunden en perjuicio de los intereses públicos fundamentales o de su buen despacho”
Además, mencionaron que el artículo 110, fracción X, de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación establece que incurre en responsabilidad la persona servidora pública que deje “de desempeñar las funciones o labores que tenga a su cargo”.
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Insistieron en que el Código Penal Federal establece como delitos por hechos de corrupción “la omisión de proporcionar el servicio público que corresponde o por recibir el pago indebido de remuneraciones sin tener derecho a ello, por lo que, en todo caso, “quienes votaron por el paro, debieron haber determinado dejar de percibir las remuneraciones que tienen como Ministras o Ministros.”
Por su parte, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Juan Luis González Alcántara Carrancá, Luis María Aguilar, Jorge Mario Pardo, Margarita Ríos Farjat, Javier Laynez, Alberto Pérez Dayán y la presidenta, Norma Lucía Piña Hernández, los ocho ministros y ministras que aprobaron unirse al paro lamentaron “las descalificaciones, los infundios y las amenazas” del pronunciamiento de Esquivel, Ortiz y Batres.
Afirmaron que la Corte, baluarte y última línea de defensa de los derechos fundamentales de todas las personas es, y debe seguir siendo, un ejemplo en el reconocimiento y la promoción de los derechos humanos, sin que esto implique el menoscabo de los derechos de las personas que laboran en la Institución.
La Suprema Corte informó que las sesiones de las Salas del miércoles 4 de septiembre y del Pleno del jueves 5 quedan suspendidas.
Se mantendrán las guardias sin que corran los plazos hasta el lunes 9 de septiembre.
Además, se atenderán los asuntos urgentes conforme al criterio de los ministros y ministras.
El lunes 9, se desarrollará una sesión privada del Pleno, donde se valorará la situación que prevalece para adoptar las medidas que sean necesarias.