Magistrados, jueces y trabajadores del Poder Judicial Federal expresaron su rechazo a la Reforma Judicial que impulsa el presidente Andrés Manuel López Obrador, y anunciaron que pondrán en marcha dos líneas de defensa jurídica para evitar que se concrete esta modificación constitucional.
Durante un acto de protesta afuera del Palacio de Justicia Federal en San Lázaro en donde se conmemoró el día del abogado, los integrantes del poder judicial rechazaron las acusaciones de corrupción que han hecho legisladores de Morena y el presidente de la república para justificar la implementación de dicha reforma
El magistrado Mauricio Barajas, explicó que una primera línea de defensa será acudir a organismos internacionales para impugnarla y la segunda, consistirá en evitar la sobre representación en el Congreso para que Morena no tenga el control total de las Cámaras de Diputados y Senadores.
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Por su parte, la jueza Juana Fuentes, dijo que los diálogos nacionales sobre la reforma al poder judicial son una estrategia dilatoria para frenar las protestas.
Insistió en que son falsas las acusaciones de que los mil 700 juzgadores federales sean corruptos, que representan a las elites, que liberan delincuentes, al rechazar que la elección de jueces sea la solución.
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En tanto, Patricia Aguayo representante de mandos medios del poder judicial, señaló que la reforma impulsada por el presidente López Obrador obedece a un discurso de odio emitido desde Palacio Nacional donde no se cansa de etiquetar a los magistrados y jueces como personas corruptas o como la cúpula dorada y a los trabajadores como flojos.
A esta manifestación, se unieron integrantes de organizaciones civiles como la Marea Rosa, quienes expresaron su solidaridad con la lucha de los trabajadores del poder judicial.