El pasado 28 de abril se llevó a cabo el segundo debate presidencial, en donde los candidatos: Claudia Sheinbaum (MORENA), Xóchitl Gálvez (PRI-PAN-PRD) y Jorge Álvarez Maynez (Movimiento Ciudadano) se dijeron de todo.
Durante el debate electoral, hubo varios momentos en donde Xóchitl Gálvez llamó “narcocandidata” a Claudia Sheinbaum, lo cual constituye una posible conducta calumniosa en su contra, por lo que el Instituto Nacional Electoral (INE) tuvo que tomar medidas cautelares.
INE borra fragmentos del segundo debate presidencial
Fue a través de un comunicado publicado por la cuenta oficial del INE en X, en donde informó a la ciudadanía que Claudia Sheinbaum Pardo, denunció a Bertha Xóchitl Gálvez Ruiz, por las calumnias que se dieron en su contra durante el segundo debate.
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Tras un análisis, la Comisión concluyó que es procedente la adopción de medidas cautelares, ya que a través de un análisis preliminar al material, la frase “narcocandidata”, en principio, podría tratarse de una posible conducta ilícita y calumniosa, puesto que esto está lejos de tener elementos mínimos de veracidad o base para hacer esta aseveración.
“Es procedente la adopción de medidas cautelares, toda vez que, de un análisis preliminar al material, la frase "narco candidata", en principio, podría constituir la imputación de un hecho o delito falso con impacto en el actual proceso electoral y es susceptible de constituir calumnia en contra de la quejosa”, se lee en el comunicado del INE.
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Por lo anterior, se ordenó a la Secretaría Ejecutiva del Instituto realizar las acciones necesarias para que también se suprima las expresiones traducidas en lenguas náhuatl, maya, tsotsil y de Señas Mexicana.
El INE asegura que las calumnias pueden tener un impacto negativo en el proceso electoral
Los consejeros electorales indicaron que esta medida se instruye debido a que existen elementos suficientes para determinar que podría generar un impacto en el actual proceso electoral.
Finalmente el INE solo cumplió a medias la petición de Sheinbaum: los consejeros se negaron a prohibir a Gálvez a emplear de nuevo el apodo, pues determinaron que se trata de un hecho futuro de realización incierta.