Magistrados denunciaron que las anomalías detectadas en el proceso para la elección de jueces, magistrados y ministros deberían ser causa suficiente para su anulación en cualquier democracia.
En conferencia de prensa, los juzgadores cuestionaron la opacidad del proceso, la discrecionalidad, el desorden, la improvisación y la falta de claridad en los criterios de idoneidad que deben tener las personas candidatas.
El magistrado José Rogelio Alanis, dijo que se dará de baja a jueces, magistrados y ministros que sirven al pueblo para poner a personas que serán afines al poder.
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Señaló que la acusación de nepotismo que se ha utilizado contra el poder judicial coincide ahora con la postulación de personas allegadas al poder como la hija de Bernardo Bátiz y Olga Sanchez Cordero.
“Para ellos cualquier relación de amistad es nepotismo, pues con base en eso no entiendo yo como es que pudiera tener oportunidades de ser nombrada por los comités del poder ejecutivo y legislativo la señora hija de la exministra y diputada actual Olga Sanchez Cordero ni tampoco la hija de Bernardo Bátiz”, indicó.
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En tanto, el magistrado Juan Alfonso Patiño, señaló que en cualquier democracia, la cantidad de fallas que tiene la lista de aspirantes del poder legislativo, sería suficiente para anularlo.
“Un procedimiento de esa elección con esas características en cualquier estado de derecho en cualquier sistema democrático seria materia de anulación inmediata”, advirtió.
Acompañados de la magistrada Edna López Hernández, los juzgadores señalaron que las consecuencias del actual proceso de renovación en el poder judicial serán la llegada de personas que deban su cargo a su relación familiar y al compromiso que tengan con el régimen que los colocó, además de la falta de certeza respecto a sus capacidades.