Magistradas y magistrados federales afirmaron que el día de ayer fue un martes negro, nublado y triste para el país, motivo por el cual decidieron acudir vestidos de negro a la conferencia de este miércoles.
La magistrada Carmen García González y el magistrado Rogelio Alanís García afirmaron que el ministro Alberto Pérez Dayán traicionó a la República al pronunciarse en contra de la acciones de inconstitucionalidad con las que se buscaba revertir la reforma judicial.
“Duele un poco la traición. Si vemos el término de traición en términos muy amplios implica fallarle a alguien abandonarle a su suerte, no actuar con lealtad en relación con una una posición que se ha tenido siempre. Hay traición cuando alguien debe lealtad a alguien o a otra persona o algo, a unas ideas y falla a esa lealtad y le es desleal. El ministro Pérez Dayan ayer votó contra la República, contra la democracia y contra la federalidad”.
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Por su parte, el magistrado Juan José Olvera López dijo que el pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) tomó una decisión precipitada al desestimar las acciones de inconstitucionalidad.
Al respecto explicó que las ministras y ministros debieron entrar a la discusión de fondo del asunto, pues siete de ellos consideraron que dichos medios de control constitucional sí eran procedentes.
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“Para ser enfáticos en que en este punto no era si querían votar o no el fondo, tenían la obligación constitucional como juzgadores de revisar el fondo y pronunciarse sobre el fondo. Me parece que hay una primera falla metodológica de la decisión que llevó a una decisión precipitada de que no se lograba la votación para la invalidez, porque podía ocurrir, como ocurrió en este caso, que el ministro Pérez Dayán perdió la procedencia y después en el fondo estuvo de acuerdo con la decisión de fondo”.
A decir de Olvera López, con el fallo del máximo tribunal del país se perdió la oportunidad de poner fin a la crisis constitucional.
“Se murió la oportunidad, el día de ayer, de ponerle fin ya a esta crisis constitucional; pero, desde luego, siguen otras acciones, seguiremos en ellas y cuando las cosas están mal y cuando son del calado como el que estamos enfrentando, de la profundidad como estamos enfrentando de poner en riesgo el estado de derecho mismo en México, no debemos los que tenemos la responsabilidad de ser defensores de los derechos humanos, a través de los juicio amparo, no debemos abandonar la obligación de seguir insistiendo a través de todos los mecanismos que el propio estado derecho nos brinda”.
Las y los juzgadores federales externaron su confianza de que por medio de los juicios de amparo y de las acciones que es realizarán ante organismos internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, se pueda revertir la reforma judicial.