Adriana Dávila, candidata a ocupar la dirigencia nacional del PAN, aseguró que más allá de los festejos por la toma de protesta de Claudia Sheinbaum como presidenta, el Partido Acción Nacional “no puede adoptar el papel de porrista y mucho menos rendirse en un franco entreguismo institucional”.
Afirmó que, como oposición, el PAN debe ser vigilante y crítico frente al Gobierno de México.
Dávila Fernández sostuvo que el discurso de la presidenta en su toma de protesta no planteó ningún compromiso con los mexicanos sobre los graves y enormes problemas que se potencializaron con el gobierno de la llamada cuarta transformación.
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Por ello, propuso diez medidas urgentes para atender los asuntos más urgentes.
Recuperar y fortalecer la política integral de protección civil ante la desaparición de los instrumentos de atención a desastres naturales.
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Abrir el diálogo con las familias de las personas desaparecidas, presentar un plan para reducir la violencia y los feminicidios, así como consultar a la Corte Interamericana de Derechos Humanos sobre las reformas al Poder Judicial, la Ley de Amparo y la integración de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional.
Asimismo, investigar y rendir cuentas sobre la corrupción y el tráfico de influencias en las mega obras y empresas del Estado.
Implementar un programa contra la pobreza extrema e impulsar un presupuesto federalista.
Además, que la Fiscalía General de la República rinda cuentas, especialmente ante las omisiones del anterior gobierno respecto al Cártel de Sinaloa y en los eventos ocurridos en esa región.
Informar sobre las cuentas pendientes por pagar en adquisiciones y obras públicas no saldadas por la administración saliente, y salvaguardar la riqueza ecosistémica de México.