Los diputados federales y senadores de la República, así como como congresistas locales afines a Marcelo Ebrard, lanzaron una “contra carta” de respuesta a legisladores que simpatizan con la aspirante Claudia Sheinbaum y algunos otros con Adán Augusto López, que salieron a pedir unidad.
Ello en medio de las denuncias de Ebrard Casaubón y sus simpatizantes, sobre las irregularidades en la campaña de Sheinbaum Pardo.
La unidad no se da por “decreto”
Uno de los principales promotores del excanciller, el diputado federal Emmanuel Reyes, aseguró que la unidad no se da por “decreto”, sino respetando las reglas del proceso interno.
Te podría interesar
El legislador y otros parlamentarios “marceliastas”, difundieron en redes sociales su pronunciamiento.
En un texto titulado “¡La unidad se construye, no se decreta!“ y que va dirigido “al pueblo de México”, los seguidores de Ebrard Casaubón coincidieron en que es necesaria la unidad en el movimiento, pero construida con base a los principios del partido, así como el respeto a las reglas internas.
Te podría interesar
“No podemos hablar de la unidad como algo aislado, vacío, como se ha pretendido hacer. Estamos convencidas y convencidos que la unidad se construye con respeto, se construye cuándo hay suelo parejo, sin mentir, escuchando legítimamente al pueblo”, advirtieron.
Denunciar no es calumniar
En defensa de su decisión de dar a conocer las presuntas irregularidades en el proceso interno, principalmente en las que favorecen a la exjefa del gobierno en la Ciudad de México, rechazaron caer en calumnias y negaron provocar confrontaciones.
Dijeron tener claro que los adversarios están fuera de los partidos que representan, pero es justo demandar que se cumplan las reglas acordadas.
Recordaron que los aspirantes se comprometieron a ser austeros, evitar derroche en publicidad y propaganda, a rechazar prácticas antidemocráticas como el acarreo, la coerción y las alianzas con grupos o personas “a cambio de prebendas”.
A la dirigencia nacional morenista le advirtieron que si incumple con su obligación de vigilar el proceso, cometerá un “gravísimo error”.
Aceptar prácticas desleales y antidemocráticas, propias de regímenes anteriores y con la contra las cuales se luchó, es inaceptable, anotaron.
Sentenciaron que no callarán cuando ese tipo de irregularidades se registren en el movimiento.
“La dirigencia nacional debe garantizar la imparcialidad del proceso en marcha, porque la unidad se basa en ello, en el respeto a los principios y a cada una de las personas que aspiran a coordinar los comités de defensa de la cuarta transformación”, exigieron.
Al resto de sus compañeros en ambas cámaras del Congreso de la Unión, los llamaron a ser honestos y congruentes, respetando las reglas de la competencia.
Demandaron que se permita a la ciudadanía y al “pueblo”, que decidan con libertad, sin condiciones y sin ejercer prácticas del viejo régimen, quién encabezará el movimiento en 2024.