El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independiente (GIEI) sobre el Caso Ayotzinapa, presentó su último informe en el que revela que el destino y paradero de los 43 estudiantes normalistas no ha podido determinarse debido a las redes de complicidad entre los agentes del Estado y el crimen organizado; podría haber documentos oficiales, específicamente de la Secretaría de la Defensa Nacional, donde se precisa el paradero de los jóvenes y denunciaron el ocultamiento sistemático y persistente de la información por parte de las autoridades sobre el caso, a pesar de la orden presidencial para abrir los archivos.
De acuerdo Angela Buitrago y Carlos Beristáin, especialistas que permanecieron acompañando la investigación de los padres de los normalistas desaparecidos, señalaron que existe evidencia contundente que muestra que elementos de la policía municipal, estatal, federal, Cisen y Ejército estuvieron en la zona en Iguala, donde fueron inicialmente atacados y posteriormente desaparecidos los estudiantes.
De acuerdo a la evidencia pudieron confirmar que policías de diferentes corporaciones y Guerreros Unidos participaron en el ataque conjunto contra los normalistas, de acuerdo al propio Carlos Beristáin, toda esta información se ha ocultado.
De acuerdo Angela Buitrago hay un registro de más de mil llamadas, de las cuales 500 fueron elegidas en donde se confirma que el Ejército, la PF, los policías estatales y municipales sabían que estaba pasando en tiempo real, esto en un periodo crítico de ocho de la noche del 26 de septiembre a las seis de la mañana del día siguiente, éstas se realizaron entre elementos de los cuerpos de seguridad, al C4, al centro de investigación del ejército y con miembros de la delincuencia organizada; confirmaron que también había comunicación sobre el ataque a los estudiantes con Radio Taxis, Taxis, personas no reconocidas y otras que al parecer son informantes no oficiales de la Sedena; ademas en tiempo real se informaba a las oficinas del alto mando del Ejército en la CDMX por lo que el entonces Secretario de la Defensa y Miguel Ángel Osorio Chong entonces titular de la Segob sabían y deben declarar.
El Grupo confirmó que elementos de la Policía Federal y de la Sedena estaban presentes cuando la delincuencia organizada se llevaba a los estudiantes, los cuales fueron separados en grupos y ejecutados en diferentes áreas cercanas a la zona; un grupo de estudiantes habría sido introducido inmediatamente después de asesinarlos, a una funeraria en Iguala donde fueron cremados y sus restos esparcidos posteriormente en la barranca de La Carnicería donde se localizaron restos de Joshibany y Christian; otros fueron llevados a una cueva y de otros se desconocen los detalles. La Marina encontró un día después bolsas en el Río San Juan que fueron manipuladas en su contenido.
Los expertos independientes, aseguraron incluso con la voz quebrada ante los padres de los normalistas, que “llegaron al límite” y concluyen de esta manera su labor de investigación, esto aseguraron, no significa que las autoridades deben detener la búsqueda de los normalistas y concluyeron que el presidente Andrés Manuel López Obrador, ha sido notificado de cada detalle de la investigación y también como las autoridades principalmente el ejército, han ocultado los detalles el caso y que incluso han movido la ubicación de los archivos del caso Ayotzinapa para que no puedan ser analizados.