El extitular de la entonces Procuraduría General de la República (PGR), Jesús Murillo Karam, interpuso un juicio de amparo para impugnar la vinculación a proceso y la prisión preventiva que se dictó dentro del segundo proceso penal que se inició en su contra por los delitos de tortura y desaparición forzada en agravio de Felipe Rodríguez Salgado, El Cepillo, jefe de sicarios del grupo criminal Guerreros Unidos, dentro de la causa penal 41/2023.
Una juez de distrito le concedió la suspensión definitiva al exgobernador de Hidalgo para el efecto de que Felipe de Jesús Delgadillo Padierna, juez de control con residencia en el Reclusorio Sur, se abstenga de declarar la apertura del juicio oral una vez que concluya la etapa intermedia.
La medida cautelar también es para el efecto que Murillo Karam quede a disposición del juzgado de amparo en lo que se refiere a su libertad en el lugar de reclusión y a disposición del juez de la causa para la continuación del procedimiento.
Te podría interesar
La Fiscalía General de la República (FGR) acusó a Murillo Karam de formar parte de “una empresa criminal” que cometió “delitos de lesa humanidad” y “cimentó la verdad histórica en tortura y desaparición forzada”.
Delgadillo Padierna consideró válidos los elementos de prueba presentados por los fiscales en el sentido de que durante la conferencia de prensa que Murillo Karam encabezó el 27 de enero de 2015, habría dado “indicaciones de manera secreta” a Tomas Zerón y a otros respecto de la línea que debían seguir para crear y dar sustento a la llamada verdad histórica.
Asimismo, se dio a conocer que las autoridades federales utilizaron el malware Pegasus para espiar a Rodríguez Salgado y 14 de sus familiares.
Te podría interesar
Delgadillo Padierna dio un plazo de 6 meses para el cierre de la investigación complementaria, el cual concluye el 23 de octubre.
Este caso está relacionado con un video difundido en julio de 2020 en el que aparece Tomás Zerón de Lucio, ex titular de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), participando en un interrogatorio ilegal, en el que se muestra a El Cepillo, sin camisa y con el rostro cubierto, declarar bajo amenazas y sin asistencia legal, testimonio que no fue incorporado al expediente del caso.