La defensa de la ministra Yasmín Esquivel Mossa afirmó que su cliente no tiene la mínima intención de renunciar a su cargo tras la investigación que se inició por el plagio de su tesis de licenciatura.
En conferencia de prensa en la que se hizo un recuento de este caso, el abogado José Monroy Zorrivas sostuvo que la integrante de la Suprema Corte de Justicia es una mujer que cree en el derecho y en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
“No hay la mínima intención por parte de la ministra Yasmin Esquivel de renunciar a la función y al cargo de ministra, no existe. Por el contrario, lo que está haciendo Yasmín Esquivel es una muestra de entereza, de dignidad, defendiendo su prestigio, su decoro, en el ámbito jurídico, no peleando contra la UNAM, que ya lo hemos dicho, la UNAM no es el objeto de golpeo entre Yasmín Esquivel y la UNAM”.
Monroy Zorrivas aseveró que Esquivel Mossa dará la batalla hasta el final, pues es una mujer con valores de honestidad en integridad.
“La actitud de Yasmín Esquivel está haciendo una muestra de integridad, de honor, de fortaleza, también emocional y que va a dar la batalla hasta el último momento por la legalidad, por el bien de la UNAM y porque salga a flote la verdad jurídica”.
Por su parte, el abogado Eduardo Andrade Sánchez adelantó que en caso de que la UNAM cometa una nueva atrocidad o ilegalidad, Yasmín Esquivel acudirá a los procedimientos legales, por lo que confió en que las autoridades universitarias reflexionen de forma adecuada.
“Espero que haya la reflexión adecuada en el Comité Universitario de Ética, se percaten de la gravedad, del riesgo de poner en entredicho el prestigio de la universidad y actuar ilegalmente para intentar producir una condena, peor aún si se quisiera llevar a algún otro órgano de la universidad el resultado que tuviera este comité universitario”.
Los abogados insistieron que 20 pruebas técnicas, científicas y testimoniales contundentes, demuestran que Yasmín Esquivel es la autora original de su tesis de licenciatura, elaborada hace más de 36 años, mismas que han sido desestimadas sistemáticamente por la UNAM.