En el Senado de la República, integrantes de la bancada del Partido del Trabajo (PT) solicitaron a la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) federal, establecer coordinación con autoridades locales en materia de agua, y con la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), para evitar abusos en la venta de pipas de agua en zonas del país donde ese recurso escasea.
En un punto de acuerdo, las senadoras Geovanna Bañuelos, Cora Cecilia Pinedo, Martha Cecilia Márquez y el senador Joel Padilla, demandaron que las instancias señaladas actúen frente al abuso de “piperos” que lucran con la necesidad de la población.
Pidieron que las autoridades locales se hagan responsables de proporcionar a la población el servicio emergente de agua potable, proporcionando pipas gratuitas a las poblaciones afectadas por escasez extraordinaria de ese elemento.
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Señalaron que en caso de falta de agua, la PROFECO debe emprender acciones para vigilar la actuación de proveedores privados de agua potable en pipas, y proteger los derechos de los consumidores.
A la alza, la escasez de agua en regiones del país
Los congresistas del PT manifestaron que la falta de agua potable es un problema que va en aumento.
En el caso de la Ciudad de México, recalcaron que en alcaldías como Magdalena Contreras y Tlalpan, la contratación de pipas de agua potable tiene un costo que va de mil 800 a 2 mil 500 pesos, cuando hasta hace tres años, el pago por ese servicio era en promedio de mil 200 pesos por unidad.
En la alcaldía Iztapalapa, donde la falta de agua siempre ha afectado a la población, dijeron, las pipas cuentas entre mil 400 y 2 mil 500 pesos; en Gustavo A. Madero cuestan entre mil 200 y 2 mil 100 pesos; y en Tláhuac, los cobros por pipas de agua van de mil 400 a 2 mil 400 pesos.
Recordaron que el estado de Jalisco también está pasando por problemas de abasto de agua potable.
Afirmaron que de acuerdo a un estudio en la materia, se estima que en el país 12 millones de personas no tienen acceso al agua potable y muchas de ellas, se ven obligadas a pagar de su bolsillo y frecuentemente, pipas de agua.
Subrayaron que de los 653 acuíferos que existen en el país, más de 100 están en condiciones de sobreexplotación; aunado a que el 46 por ciento del agua potable disponible se pierde en fugas en las redes de abastecimiento.
Advirtieron que el 80 por ciento de los cuerpos de agua en el país tienen algún grado de contaminación por descargas de desechos industriales y sólo uno de cada 100 litros de agua de lluvia, es captado adecuadamente y aprovechado en distintas actividades.
A ello se suma, dijeron, las cada vez más frecuentes y largas temporadas de sequía en el país que de acuerdo a la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), afectan al menos a la mitad del país.