El representante permanente de México ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Juan Ramón de la Fuente, demandó ante el Consejo de Seguridad que las principales naciones productoras de armas asuman una mayor responsabilidad para frenar el tráfico ilegal de armas en nuestro país y el mundo.
Destacó que la cancillería mexicana ha hecho un gran esfuerzo ante tribunales para impedir lo que llamó el “tráfico desbocado” de las armas convencionales, pero también reconoció que la ONU debe tener una mayor participación al respecto.
“No es un debate fácil, porque ahí (en el Consejo de Seguridad) están los Estados Unidos, está China, Francia y el Reino Unido que son los principales productores de armas, porque lo que decimos es que todos somos corresponsables de este fenómeno, pero quienes producen las armas tienen una mayor responsabilidad”, destacó el diplomático.
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Lo anterior, dijo, no quiere decir que México evada sus obligaciones en el combate a este delito, sino de lo que se trata es que cada quien asuma la parte que les corresponda.
Otro de los temas que planteó el representante de México ante la ONU fue el creciente mercado de armas a nivel privado y del que algunas naciones han sido omisas por tratarse de un asunto particular.
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“Hay empresas que se dedican a contrabandear, traficar estas armas, y a veces los países, el estado se hacen toda vez que se trata del sector privado. Nosotros nos permitimos recordarles que es su responsabilidad, porque en todo caso el permitir que estos sectores comercialicen es bajo su complacencia y eso los hace copartícipes”, subrayó Juan Ramón de la Fuente ante el organismo internacional.
Destacó que el punto central de la ONU en su agenda es que estas armas no deben llegar a los grupos terroristas o bandas organizadas y que hay tratados internacionales que obliga a las naciones productoras a que se cumplan los acuerdos signados.
Consideró que de poco servirán los esfuerzo que realizan países como México para frenar la violencia en diversas zonas o estados, si las naciones no hacen su parte por frenar el tráfico ilícito de armas.