Las mujeres son el sector más excluido del sistema laboral, el más violentado en sus derechos a un trabajo digno y sin ingresos suficientes que les permitan superar la pobreza, reconoció Paulina Gutiérrez integrante de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza.
En el país hay 21.5 millones de mujeres en edad de trabajar excluidas del trabajo: 4.4 millones están desempleadas, buscando trabajo o disponibles y sin impedimento para trabajar, explicó en el marco del Día Internacional de las Mujeres.
También en el país , hay 17 millones que no están disponibles debido a que realizan labores de cuidado y domésticas, sin remuneración. Estas labores no remuneradas tienen un valor económico equivalente a 26 puntos del Producto Interno Bruto (PIB) del país, y aún así se les cataloga como población “no económicamente activa”.
Tomando en cuenta estos indicadores de 2005 a 2022, en estos 18 años la proporción de mujeres no disponibles por labores de cuidado y domésticas pasó de 98% a 93%; es decir, apenas bajó cinco puntos en casi dos décadas. A ese ritmo, al país le tomaría otros 16 años bajar a 90% (en 2038) y hacia el inicio del Siglo XXII, en el año 2100, podría llegar apenas al 70%.
Las mujeres tienen una participación laboral de 40%, pero aportan el 60% del desempleo. En realidad, la tasa de desempleo de las mujeres es de 15.7%, considerando tanto a las desocupadas como a las disponibles, mientras que la tasa general de desempleo es de 11%.
La especialista señaló que de acuerdo a datos del INEGI refieren que además de las mujeres excluidas, hay 23.6 millones de mujeres con trabajo, pero 7 de cada 10 (16.3 millones) carecen de ingreso suficiente para superar el umbral de pobreza y 6 de cada 10 (14.1 millones) trabajan sin acceso a los servicios de salud y protecciones de seguridad social.