Habitantes de comunidades de Yucatán afirmaron que el proyecto del Tren Maya les esta robando la vida, además de que está matando la biodiversidad.
En conferencia de prensa, Raquel Flota Báez, representante de la Asamblea Muuch Xíinbal en Dziuche Yucatán, sostuvo que la “tierra se está quedando ciega”, debido a que las obras están afectadas los cenotes.
Por su parte, Gustavo Aldair Suaste Ortiz, representante de la Asamblea de Defensores del Territorio Maya, destacó que el Tren Maya se trató de una imposición por parte del gobierno federal, toda vez que no consultó a las comunidades indígenas.
En su oportunidad, Gemma Santana, integrante del movimiento Selvame del Tren, adelantó que enviarán una carta a la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña Hernández, para solicitar que se agilicen los procesos judiciales en los juicios de amparo que se interpusieron contra el Tren Maya.
Al respecto, mencionó que a la fecha ya se promovieron 10 demandas de garantías, de las cuales cinco se encuentran congeladas en los juzgados de distrito.