Save the Children acudió a los municipios de Acapulco y Coyuca de Benítez, declarados como zona de desastre natural en Guerrero a causa del paso del huracán Otis, en donde constató el daño a viviendas y escuelas y que miles de familias aún enfrentan necesidades básicas como alimentos y agua potable.
En respuesta, el equipo humanitario de Save the Children, en coordinación con las autoridades locales y Protección Civil entregaron más de 2 mil 800 paquetes de alimentos, 6 mil 547 litros de agua potable, kits de bienestar e instalaron un espacio amigable para dar contención emocional a niñas y niños, señaló Fátima Andraca, Directora de Respuesta Humanitaria de Save the Children en México.
Muchas familias lo han perdido todo, desde alimentos, ropa, muebles, hasta útiles escolares y juguetes; las escuelas que pudo visitar la organización se encuentran completamente destruidas, los techos de lámina desaparecieron, el inmobiliario se destruyó, las ventanas se rompieron y restos de objetos y árboles se encuentran esparcidos alrededor, haciendo imposible que los planteles puedan reabrir para reanudar las clases.
La situación se puede tornar aún más compleja conforme pasan los días advirtió, ya que muchas niñas y niños han cambiado sus actividades de educación y juego para dedicarse ahora a cuidar hermanos menores o limpiar los restos de casas afectadas. Los precios de los alimentos han aumentado en más del 50% y aún no se restablecen todos los servicios básicos para toda la población.
Para responder a la gravedad de la emergencia, Save the Children mantendrá presencia en las zonas afectadas apoyando con acciones enfocadas a la protección de la niñez, entrega de kits de higiene y saneamiento, recuperación de materiales para vivienda y escuelas y provisión de kits de alimentos.
Además de las entregas urgentes, se perfila una estrategia para recuperar los servicios educativos, para apoyar con soluciones de agua y saneamiento, y para acompañar alternativas de ocupación y medios de vida para que las familias puedan encontrar alternativas dignas de tener sus propios ingresos, concluyó.