Arturo Zaldívar Lelo de Larrea presentó este martes al presidente Andrés Manuel López Obrador su renuncia al cargo de ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la cual aún debe ser aprobada por el Senado de la República.
Está decisión de Zaldívar Lelo de Larrea se da prácticamente a un año de concluya el periodo para el que fue electo, es decir, de diciembre de 2009 a noviembre de 2024.
Tras el anuncio, Claudia Sheinbaum, coordinadora de la Defensa de la Cuarta Transformación subió un mensaje a su cuenta de X donde aparece con Zaldívar.
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Me reuní con Arturo Zaldívar y acordamos trabajar juntos para avanzar en la transformación del país, puso en su mensaje.
En una carta dirigida al titular del Ejecutivo federal, el expresidente del alto tribunal aseguró que su ciclo en la Corte ha terminado y destacó que durante estos 14 años impulsó los “criterios más vanguardistas que constituyeron el nuevo paradigma constitucional en la defensa de los derechos humanos de todas las personas”.
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Indicó que toca ahora seguir sirviendo a su país, desde los espacios que le brinden la oportunidad, en la “consolidación de la transformación de un México más justo y más igualitario, en el que sean prioridad quienes menos tienen y más lo necesitan” y aseveró que el “México con el que soñamos es posible. Sigamos avanzando en su construcción”.
SCJN esperará lo que determine el Ejecutivo y el Legislativo
Por su parte, la SCJN informó que está a la espera de lo que determinen los Poderes Ejecutivo y Legislativo respecto a la renuncia de Arturo Zaldívar.
Asimismo, recordó que la Constitución establece que las renuncias de los ministros solo procederán por causas graves, serán sometidas al Ejecutivo y, si éste las acepta, las enviará para su aprobación a la Cámara Alta.
El mismo artículo establece que cuando la falta de un ministro excediere de un mes, el presidente de la República someterá el nombramiento de un ministro interino a la aprobación del Senado.
Del mismo modo, si faltara un ministro por defunción o por cualquier causa de separación definitiva, el primer mandatario someterá un nuevo nombramiento a la aprobación del Senado.