Las presiones ejercidas por parte del Gobierno Federal, gobernadores de distintas entidades y cualquier otra persona, hacia los legisladores que en el Senado de la República están discutiendo la reforma que amplía la intervención de las Fuerzas Armadas en seguridad pública, son inaceptables e incluso configuran el delito de “chantaje”, advirtió el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Santiago Creel.
El congresista exhortó a quienes estén bajo ese tipo de coacción a armarse de valor civil y presentar denuncias incluso por la vía penal.
Lo anterior, en el contexto del debate de la reforma constitucional que extiende hasta 2028 la presencia militar en las calles del país, el cual se desarrolla en la sede senatorial.
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También en el marco de la serie de mensajes emitidos por gobernadores de distintas entidades, como Hidalgo, y el dirigente del partido Morena, convocando a los colegisladores a votar a favor de dicho proyecto promovido por la bancada del PRI en San Lázaro.
Asimismo, luego de que su ahora excompañero de partido en PAN y senador de la República, Raúl Paz, renunciara a las filas albiazules y se sumara a Morena, dando un voto más a esa bancada en el Senado, en el debate sobre las Fuerzas Armadas.
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“Yo espero que quienes han sido objeto de chantajes, tengan el valor civil de expresarlo públicamente, acreditarlo y que procedan si fuera el caso, desde el punto de vista penal”, recalcó.
Subrayó que el voto de los parlamentarios debe ser libre y a conciencia y si bien puede haber diferencias al momento de aprobar o rechazar reformas, es inadmisible que los derechos protegidos por la Constitución sean violentados con presiones y coacción ejercida desde espacios de gobierno, cargos públicos o políticos.
Amenazas y presiones
Calificó como antidemocrática, la práctica de utilizar los instrumentos del Estado y los espacios de poder y decisión en la administración pública, para amenazar y sesgar el sentido del voto en el Legislativo.
Recalcó que esas conductas no solo son reprobables, sino configuran delitos que deben ser denunciados y sancionados.
“Porque eso no se llama presión, se llama chantaje que es la palabra correcta que hay que utilizar, entonces, pues el chantaje inclusive está tipificado como delito entonces esto es muy grave”, alertó.
Recordó que la Constitución protege no solo el voto de los congresistas, sino sus expresiones en el ejercicio de las funciones legislativas, por lo que cualquier intento de impedir ese ejercicio es antidemocrático e ilícito.
PAN en contra
Creel Miranda expresó su confianza en que los senadores panistas mantendrán en firme su postura en contra de la minuta de la Cámara que se discutía en el Senado de la República, en forma de dictamen y que por falta de acuerdos y a petición de las presidencias de las comisiones dictaminadoras, regresó a estas.
Aprovechó para lamentar que el senador Raúl Paz haya renunciado a la fracción albiazul, para trasladarse a la de Morena.