El Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA) validó, por mayoría de nueve votos, la resolución de la Secretaría de la Función Pública (SFP) con la que inhabilitó por 10 años a Valentín Cárdenas Lerma, quien en el 2015 se desempeñaba como director del penal del Altiplano cuando se registró la fuga del líder del Cártel de Sinaloa, Joaquín, El Chapo, Guzmán.
El ex servidor público falleció en enero del 2021 a causa de la Covid-19; sin embargo, la magistrada Nora Elizabeth Urby Genel, quien tuvo a su cargo el proyecto de resolución, explicó que no era procedente decretar el sobreseimiento, ya que en el juicio se reclaman prestaciones de carácter patrimonial y en caso de declararse una sentencia de nulidad se podría coartar el derecho de acceso a la justicia a sus familiares.
Por mayoría de nueve votos, la Sala Superior del órgano jurisdiccional también negó el pago de prestaciones reclamadas a su albacea.
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La magistrada declaró infundados los agravios de Cárdenas Lerma, quien argumentó que no fue omiso en la elaboración de los presupuestos del año 2015.
“A partir de que asumió el cargo de director general, el actor tenía conocimiento de las diversas fallas en los sistemas de seguridad y en el ejercicio 2015, año en el que aconteció la emergencia y en que el actor se encargó de formular el presupuesto correspondiente, omitió solicitar recursos a las partidas presupuestarias 33701 y 55102 correspondientes a los rubros ‘gastos de seguridad pública’ y ‘equipamiento de seguridad’, lo que evidencia que sí incurrió en la conducta que se le imputó”.
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Asimismo, Urby Genel refirió que el ex director del penal del Altiplano también fue omiso al no activar la alerta máxima tras la fuga del Chapo Guzmán.
“Se advierte que el actor, si bien es cierto que se encontraba fuera del centro de labores en el momento en el que surgió la emergencia de seguridad, también lo es que se le informó de inmediato de dicha situación y a partir de ese momento se encontró en constante comunicación con los servidores públicos que se encontraban en el lugar de los hechos, sin que en momento alguno ordenara la implementación ni del código rojo, ni de la alerta máxima”.
En noviembre de 2018, un tribunal federal ordenó la liberación de Valentín Cárdenas, quien permaneció más de tres años en el penal de El Rincón, Nayarit, al resolver que no se encontraba en el penal al momento de la fuga de Guzmán Loera.