En la Cámara de Diputados se inauguró la Semana Nacional de la Infraestructura Transformadora, durante la que se analizará la política en la materia y las acciones para darle un enfoque de “bienestar”, respeto a los derechos de la dignidad de las personas y el cuidado al medio ambiente.
Al encabezar el acto, el presidente de la Comisión de Infraestructura de San Lázaro e integrante del Partido del Trabajo (PT), Reginaldo Sandoval, señaló que en el país muchas obras se iniciaron en gobiernos anteriores, de manera “ambiciosa”.
Tampoco se cuidó en la ley que hubiese evaluación previa sobre su impacto “agresivo” e irremediable en las comunidades y la naturaleza.
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“Que la infraestructura en el país se convierta en el pivote para que el crecimiento y desarrollo económico, poniendo en el centro a las personas, sus derechos y el cuidado del medio ambiente”, dijo.
“Si bien la dignidad y los derechos humanos son inherentes a la construcción de infraestructura, muchos de los proyectos en México han transitado en la dirección opuesta, es decir, se inician obras de manera ambiciosa y descuidada, sin evaluar previamente su impacto, muchas veces agresivo e irreversible”, dijo el diputado Sandoval Flores.
El congresista indicó que durante la Semana Nacional de Infraestructura, 99 expertos e invitados debatirán sobre los retos para emitir soluciones legislativas, técnicas y tecnológicas, de diagnóstico, financiamiento y asociaciones estratégicas en el sector, así como el combate a la corrupción en el área de contrataciones para obras públicas.
Obras y participación ciudadana
En su intervención, el coordinador parlamentario de la bancada del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Ignacio Mier, indicó que la participación ciudadana es central en el marco de las políticas de infraestructura.
Los habitantes del país, apuntó Mier Velazco, tienen derecho a reflexionar, cuestionar y participar así como expresar sus necesidades.
En cuanto a la labor de los congresistas y la definición del presupuesto para obras de infraestructuras “transfornadoras” a nivel federal, estatal y municipal, indicó que se debe garantizar el uso adecuado y racional de los recursos públicos y la reactivación económica.
En representación de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), el subsecretario de Infraestructura, Jorge Nuño Lara, se pronunció a favor de contar con un marco legal que fortalezca la planeación de las obras a largo plazo y fortalecer las decisiones en materia de inversión.
En defensa de las megaobras del Ejecutivo Federal, afirmó que tienen como propósito impulsar el desarrollo incluyente, promover la competitividad y reducir brechas de rezago y marginación en distintas regiones del territorio.
Destacó la importancia de las obras de infraestructura para contribuir a la reactivación económica, con un enfoque de “valor social”, es decir, que los ciudadanos puedan acercarse a servicios de salud, educación, al empleo y al desarrollo de sus regiones.
Recordó que en materia de movilidad están en marcha 5 proyectos de modernización de carreteras federales; la construcción de 12 caminos rurales; se promueve el Plan Nacional Ferroviario con un total de 15 proyectos de los cuales 6 están en marcha, 5 en vías de autorización y los restantes en proceso de preparación.
En su participación, el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Francisco Javier Solares, indicó que hace falta una mayor inversión en infraestructura, construcción, conservación y mantenimiento.
El monto actual equivale al 2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), cuando debería ser de al menos el 5 por ciento, refirió