La Comisión Nacional de los Derechos Humanos pidió al gobernador de Oaxaca Alejandro Murat y al Fiscal del Estado Arturo de Jesús Peimbert realizar un reconocimiento de responsabilidad y ofrecer una disculpa pública a la saxofonista María Elena Ríos y a su familia, quienes fueron revictimizadas durante el desarrollo de las investigaciones para esclarecer la agresión que sufrió el 9 de septiembre de 2019.
La CNDH emitió la recomendación 28/2022 por violencia institucional y por la vulneración del acceso a la justicia de la artista, quien fue agredida por varios sujetos al arrojarle ácido que le provocó quemaduras en la cara y el cuerpo; un caso en el que fue señalado como autor intelectual el exdiputado Juan Antonio Vera Carrizal.
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Destacó que la agresión y las omisiones de las autoridades ocurrieron en el marco de la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres que se encuentra activada en Oaxaca desde el 30 de agosto de 2018 y que el gobierno estatal incumplió.
Consideró que la Fiscalía estatal no elaboró un plan de protección en coordinación con otras dependencias de la administración pública estatal o municipal, ni ejecutó adecuadamente medidas en favor de la víctima ni de sus familiares.
Afirmó que en las investigaciones la Fiscalía General y el gobierno del estado presentaron información incompleta o negaron de manera reiterada su plena colaboración, con lo que se obstaculizó la investigación.
Por ello, pidió la reparación del daño ocasionado a la víctima y a sus familiares, y que se les proporcione la atención médica y psicológica que requieran.
Además, deberán colaborar en la presentación y seguimiento de las quejas ante los Órganos Internos de Control en contra de las personas servidoras públicas responsables.