La Arquidiócesis Primada de México, lanzó el “Protocolo de intervención por abuso sexual de niñas, niños, adolescentes o personas vulnerables.
Ante la crisis de delitos sexuales en contra de las infancias que cometen sacerdotes y otros religiosos, es la primera vez que la iglesia católica del país toma cartas en el asunto y reconoce el problema que existe dentro de “la casa de dios”.
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Este documento tiene un costo de 100 pesos y busca orientar a fieles y clérigos reconocer este tipo de casos y denunciarlo tanto a las autoridades civiles como eclesiásticas.
En México hay aproximadamente 357 casos de abuso sexual infantil desde 2010
El protocolo hace un repaso en qué es el abuso sexual, así como las leyes que protegen a las infancias en México.
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Un texto que no tiene precedentes, ya que también la Arquidiócesis reconoció las consecuencias que puede tener el abusador desde el punto de vista civil como canónico.
“Este protocolo será una herramienta fundamental para ofrecer información necesaria accesibles y claro para la atención de las víctimas cuando el caso de abuso suceda en nuestra arquidiócesis; dijo el arzobispo Carlos Aguilar Reyes durante la presentación del documento.
Identificar es reconocer el problema de abuso infantil
Lo que más llama la atención del protocolo es la categorización que se hace ante las dinámicas patológicas que se llevan a cabo dentro de la iglesia y que ha provocado el síndrome del clericalismo.
En los último 10 años, la iglesia investigó a 426 sacerdotes por haber cometido algún tipo de delito sexual en contra de menores de edad, de estos, solo 217 pasaron a manos del ministerio.
De acuerdo con la representante de la Conferencia de Superiores Mayores de Religiosos de México, María de la Paz Viniegra Mesa, desde 2010, en México hay por lo menos 357 casos de abuso sexual infantil cometidos por clérigos católicos.