Las comisiones unidas de Puntos Constitucionales, Reforma Política Electoral y Gobernación de la Cámara de Diputados aprobaron este lunes el dictamen de la reforma electoral, centrado en la iniciativa del Presidente de la República.
En medio de un debate de reproches, en el que salió a la luz el tema de la manifestación de este domingo 27 de noviembre, organizada por el Presidente de la República, los legisladores de Morena y aliados del Partido Verde (PVEM) y el Partido del Trabajo (PT), emitieron 62 votos a favor.
Las bancadas del PRI, del PAN, del PRD y de Movimiento Ciudadano (MC), dieron 48 votos en contra.
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El documento será enviado a la Mesa Directiva del recinto para alistar su discusión y eventual rechazo en el Pleno, durante la sesión en modalidad presencial citada para este martes 29 de noviembre.
Al fijar posicionamientos, las bancadas de mayoría y oposición no cedieron ni un paso en su determinación, las primeras de aprobar el proyecto, y las segundas, de rechazarlo.
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Defensa reforma electoral
En defensa del proyecto a discusión, los legisladores de Morena y fracciones aliadas, subrayaron que la reforma tiene como fin ahorrar recursos públicos y destinarlos a los programas sociales del Ejecutivo Federal.
Hicieron cuentas y afirmaron que se ahorrarían con la reforma miles de millones de pesos.
Tan solo en el recorte al financiamiento ordinario en temporada no electoral, se prevé “ahorrar” más de 6 mil millones de pesos.
Reclamaron a la oposición la advertencia de que el “el INE no se toca”. Parecen “disco rayado”, espetó el diputado Mario Miguel Carrillo.
Al rechazar que la intención de la mayoría y el Ejecutivo Federal sea desaparecer, suprimir o eliminar al Instituto Nacional Electoral (INE), afirmaron que el organismo sólo cambia de nombre y se fortalece. La modificación es “de nomenclatura”, dijeron.
Lo anterior, pese a que la propuesta de dictamen señala que ese organismo se suprime, se sustituye completamente por un Instituto Nacional de Elecciones y Consultas (INEC).
Reconocieron que se busca reducir de 11 a 7 los miembros del Consejo General del INE, que se acotan las facultades del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y se eliminan tanto organismos como tribunales electorales locales.
“Que el ahorro presupuestal estimado en la Federación con esta iniciativa del Presidente López Obrador sería de 6 mil 244 millones de pesos, Morena es el partido que más dinero recibe, es quien más se vería afectado, pero es quien está decidido a que ese dinero se vaya al gasto social, a los programas sociales”, recalcó la diputada de Morena, Yeidckol Polevnsky.
“En esta reforma deben demostrarlo, es algo que piden los mexicanos y que quedó claro en la marcha del 27 de noviembre, y que el pueblo apoya la reforma. Y claro que el INE se toca, se reforma y se transforma”, dijo la diputada de Morena, Yolis Ramírez.
Enfatizaron que el más de millón de personas que este domingo 27 de noviembre salió a la calle a acompañar al Primer Mandatario, demostraron que respaldan su propuesta de modificaciones electorales.
“Santos oleos” a la reforma electoral
La oposición fue clara en advertir que la reforma electoral “no pasará” e incluso, puede darse por “muerta”.
Calificaron el proyecto como contradictorio, al pretender tener origen en la política de austeridad, y proponer al mismo tiempo, convocar a elecciones de siete consejeros electorales que podrían costar 8 mil millones de pesos.
Representa, sentenció la vicecoordinadora de la bancada del Sol Azteca, Elizabeth Pérez, un atentado contra las instituciones, la estabilidad política y democrática del país, politiza aún más la selección de los consejeros electorales y pretende regresar al país a las condiciones electorales de la década de 1980.
Votarán en el Pleno contra la destrucción del INE y la intención del Ejecutivo Federal de asumir el control de los organismos electorales y de quitarle al árbitro de las contiendas facultades sobre el listado de electores.
Al hacer alusión a la movilización masiva convocada por el mandatario federal, la cual dijeron, tiene tintes políticos y también electorales, los integrantes del bloque Va por México y MC, refrendaron que el “plan a” de la reforma electoral es fallido.
“Lo que nosotros vemos es un miedo terrible de Morena a perder las elecciones presidenciales de 2024, por eso el ataque permanente al INE y por eso esta intentona de querer debilitar al árbitro electoral. Hoy se le están dando los santos óleos a esta iniciativa porque mañana pasará a mejor vida en el Pleno, ¡larga vida al INE!”, exclamó el priista Eduardo Zarzosa.
“¡El INE no se toca!”, remarcó la diputada del PAN, María Elena Pérez-Jaén.
Este martes 29 de noviembre, terminará la “pesadilla” de la reforma electoral, agregó el diputado de MC, Salvador Caro.
“Estamos alegres, porque mañana termina esta pesadilla, mañana van a tener que ir con el Presidente, su bloque, a decirle que tuvo otra mala idea y como en el caso de la reforma eléctrica los va a regañar y le va a decir a su coordinador Nachito”, aseveró el diputado Caro Cabrera.
Mañana inicia “la pesadilla”: Morena
Los diputados morenistas reviraron. La diputada Yeidckol Polevnsky dijo tajante que la “pesadilla” apenas iniciará este martes en el recinto y en las calles del país, donde los ciudadanos que apoyan al Presidente reclamarán con votos el voto en contra de la oposición.
“Esta es una demanda ciudadana como ya quedó demostrado inclusive en la encuesta del INE, esto es lo que quieren los ciudadanos y nosotros vamos a defender a los ciudadanos, así que mañana empezará, pero la pesadilla para la oposición, porque los ciudadanos les reclamarán haber defendido que se queden con tanto dinero”, sentenció.
“Plan b” electoral
La previsión en el Palacio Legislativo es que, después del rechazo de proyecto aprobado en comisiones, al no alcanzar la votación de mayoría calificada requerida, de inmediato la mayoría promoverá dispensar trámites al llamado “plan b” del Ejecutivo Federal.
La batería de reformas a siete leyes distintas en materia electoral, será enviada en el transcurso de la mañana a San Lázaro.
Sin pasar por comisiones, sin dictaminar y sin dar tiempo a revisar, el tema se someterá a discusión de inmediato y para su aprobación, la mayoría de morenistas y aliados no requerirán que uno solo de los legisladores de oposición aporte votos a favor.
Lo aprobado en San Lázaro, se estima que durante la madrugada del miércoles 30 de noviembre, será enviado rápidamente al Senado de la República, con el fin de que en esa Cámara también pase por la vía del fast track.