La Compañía de Jesús lamentó que a cinco meses del asesinato de los sacerdotes Javier y Joaquín, junto con el señor Pedro Palma al interior de una iglesia en Cerocahui, Chihuahua, el caso siga impune y que la inseguridad prevalezca en la Sierra Tarahumara.
“A más de 150 días de los dolorosos hechos, la paz no ha llegado a Cerocahui, como recientemente declaró la Secretaría de Seguridad Pública Estatal. En la comunidad prevalece la inseguridad, el miedo de que la situación quede en el olvido y de que el perpetrador regrese a la zona. Reiteramos, mientras no haya justicia no se podrá hablar de paz y reconciliación”, señalaron a través de un comunicado.
Por ello hicieron un llamado a los diferentes niveles de Gobierno para continuar con la seguridad en el territorio serrano, para avanzar hacia la justicia que tanto añoran las comunidades.
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Además se sumaron al manifiesto de la Diócesis de Tarahumara, quien ha convocado a construir “un país donde verdaderamente reine la verdad y la justicia que nos lleven a la verdadera paz y amor”.