El expresidente de México, Luis Echeverría Álvarez (LEA), cumple 100 años de vida el próximo 17 de enero, es considerado uno de los más polémicos mandatarios en la historia política de nuestro país pues su gobierno se distinguió por el presidencialismo autoritario.
Además, hay que recordar que antes de ser presidente se desempeñó como secretario de Gobernación de 1963 a 1969, periodo en el que tuvo lugar la masacre estudiantil de la Plaza de las Tres Culturas en Tlatelolco.
*Información relacionada: Luis Echeverría: 100 años, 50 datos del polémico expresidente
Por lo anterior, una parte de la población mexicana lo califica de autoritario y represor, aunque para otros tuvo un desempeño aceptable ya que durante su gestión la economía mexicana creció a un nivel de 6.1 % pese a la crisis política que enfrentó tras tomar el poder.
En entrevista para MVS Noticias, Esther Martina Vázquez Ramírez, profesora e investigadora de la academia de Estudios Sociales e Históricos de la UACM nos compartió que el gobierno de Echeverría se distinguió por el presidencialismo autoritario, el partido de estado y el corporativismo.
¿Cuáles son las crisis que enfrentó Luis Echeverría?
La historiadora nos dice que cuando Luis Echeverría llega a la presidencia tuvo que enfrentar las consecuencias de la represión del movimiento estudiantil dos años antes y también la crisis del llamado desarrollo estabilizador.
“Como sabemos 1968 fue la expresión de la primera gran crisis política del régimen político mexicano, basado en tres ejes fundamentales: el presidencialismo autoritario, el partido de estado y el corporativismo”.
A dicha crisis, considera Vázquez Ramírez, se sumó la económica, que tuvo como principal expresión el cambio de rumbo de la política económica del nuevo presidente: “El llamado desarrollo estabilizador que no pudo sostener sus tasas de crecimiento, por los grandes desequilibrios en los sectores productivos al interior del país”.
Además, la catedrática asegura que la industria descansó sobre las espaldas de un campo agotado y sin recursos suficientes para equilibrar la productividad regional.
“Enfrentó tanto una crisis política como económica. Ambas recibieron la atención necesaria para poder enfrentarlas, sin embargo, al final del sexenio el balance, desde nuestra perspectiva, fue negativo”, resalta.
Modelo económico ocasionó graves problemas a México
La entrevistada nos dijo que la política económica que desarrolló se denominó desarrollo compartido: “lo que se buscaba fue la mayor redistribución del ingreso. El Presidente y su gabinete afirmaban que el crecimiento y la redistribución de ingreso eran compatibles, cuestión que nunca se pudo comprobar dada la estructura económica y política de nuestro país”.
Agregó que dicha política errática del régimen de Echeverría ocasionó graves problemas a México, mismos que se vieron reflejados en una disminución del crecimiento económico, así como en una masiva fuga de capitales y el escandaloso aumento de la deuda externa para sostener sus programas de gobierno.
Corrupción, eje del gobierno de Echeverría
Vázquez Ramírez asegura que la corrupción estuvo presente en el régimen de LEA, sobre todo vinculada al ejercicio del sistema de justicia.
“La guerra sucia desatada contra toda las organizaciones de guerrilla urbana y rural que se hicieron presentes en su régimen la vivieron en carne propia. Las desapariciones y los asesinatos, además de los encarcelamientos, fueron muestra del poco interés que tuvo el gobierno de resolver las graves diferencias políticas con la oposición política”, indicó.
Asimismo, menciona que el despilfarro de recursos se vincula con las grandes inversiones que se realizaron en la compra de empresas por parte del Estado, que al final tampoco pudieron mantenerse.
“Dichas inversiones no respondieron a una planificación económica que terminara con los desequilibrios en la estructura productiva del país”, sentencia.
Finalmente, Vázquez Ramírez considera que el ámbito de la política económica el desarrollo compartido no tuvo los resultados que se perseguían, pues el gobierno de Luis Echeverría no tuvo claridad en cómo impulsar el crecimiento económico y la distribución del ingreso.