A la mitad del sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador, hay crisis en el sector agroalimentario, ya que este perdió esquemas de apoyo enfocados a rubros prioritarios, como la comercialización, aseguramiento y desastres naturales, aseguró Álvaro López Ríos, dirigente de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA).
Dijo que a unos días de que AMLO rinda su tercer informe de gobierno, también encareció la producción de alimentos debido al alza de fertilizantes, lo que impacta directamente en los costos de producción y en la rentabilidad de los productores y provoca crisis en el sector agroalimentario.
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Precisó que desde 2018 han desaparecido los apoyos relacionados con desastres naturales, la comercialización y hasta lo referente a Agroasemex, mientras que México eleva su dependencia de importaciones de fertilizantes en más del 60por ciento.
"Estamos frente a un gobierno que no ve venir la bola de nieve de un problema productivo, económico por la falta de una política agrícola orientada a la autosuficiencia y soberanía alimentaria de este país”, explicó el dirigente de la UNTA sobre lo que considera una crisis en el sector agroalimentario.
Explicó que "tampoco se hace caso de acuerdos internacionales como el que establece la FAO que pide que cada país trabaje en garantizar cuando menos la producción del 75 por ciento de sus alimentos y en este país contamos con un déficit de 46% en la producción de alimentos".
El líder campesino señaló que el programa de apoyo y entrega de fertilizantes sólo se ha implementado para el estado de Guerrero y se amplió a Morelos, Tlaxcala y Puebla durante 2021; sin embargo, la productividad agrícola de la entidad guerrerense no ha mejorado.
Sigue promoción de fertilizantes fósiles en México
Aseguró que, aunque Gobierno Federal plantea un menor uso de fertilizantes fósiles, falta promover e incentivar la producción de biofertilizantes.
Álvaro López Ríos mencionó que cifras de la FAO revelan que en el ranking mundial, México se ubica en vigésimo octavo como productor a nivel mundial y vigésimo como importador de fertilizantes.
En 2020 la producción nacional de fertilizantes registró una disminución anual de 7 por ciento, con un volumen de 2.3 millones de toneladas, de las cuales el 44 por ciento correspondió a fertilizantes fosfatados, 31 por ciento de ácidos y 25 por ciento de nitrogenados.
Cifras de las crisis en el sector agroalimentario
El valor de la producción nacional de esta industria fue de 18 mil 660 millones de pesos, 1 por ciento menos que en 2019.
En el mismo año, el consumo total de estos insumos se ubicó en 5.7 millones de toneladas métricas que refleja un crecimiento de 6.1 por ciento respecto a 2019.
De este volumen, puntualizó, el 38.3 por ciento se cubrió con producción nacional y el 61.7 por ciento con importaciones.
Las importaciones en 2020 fueron de 3.5 millones de toneladas lo cual representó un alza de 20 por ciento respecto al 2019.
El 70 por ciento de estas compras fue de fertilizantes nitrogenados, 18 por ciento de potásicos y 12 por ciento de fosfatados.
El valor comercial de dichas importaciones fue de 968.2 millones de dólares, lo cual representó un alza de 5.4 por ciento en relación con el 2019.
Los principales orígenes de las importaciones mexicanas en 2020 fueron: Rusia, China, Estados Unidos, Indonesia y Noruega, con una participación conjunta del 64.7 por ciento en el volumen total.
Para revertir el abandono del campo y la crisis en el sector agroalimentario, López Ríos señaló que de acuerdo con las pretensiones del Gobierno Federal, es necesaria una visión de largo plazo multidimensional que impulse su desempeño y que asegure un ingreso para que los productores puedan proteger su permanencia en el sector.