En la zona sur del país, menos del 8% de la población en edad y condición de trabajar tiene un empleo formal.
Es decir, 1.6 millones de personas de casi 28 millones registrados en nueve entidades y tres de cada 4 trabajan, pero no ganan lo suficiente para adquirir la canasta básica familiar.
Lo anterior fue explicado por Rogelio Gómez Hermosillo, coordinador de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza.
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Mejores condiciones de trabajo
En conferencia de prensa, durante la presentación del Semáforo de Empleo Digno para el Sur-Sureste del país, reiteró que:
“El principal reto antes, durante y después de la pandemia por Covid-19, es mejorar las condiciones de trabajo para la población”.
“Ya que la falta de oportunidades o empleos bien remunerados, representa el riesgo de la pérdida de talento en el país”.
La muestra tomada de estados como Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Puebla, Veracruz, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, indica que el ingreso de las personas con empleo formal en la región es en promedio de 7 mil 500 pesos mensuales.
Gómez Hermosillo detalló que durante la pandemia en 2020-2021, en la zona sur sureste del país, hay un registro de 3 millones 095 mil personas subocupadas o con trabajo por horas, en los primeros seis meses de este año se sumaron más de 527 mil.
En esta región, el 97% de las personas que no pueden trabajar son mujeres y la circunstancia obedece principalmente a que se dedican a labores domésticas o de cuidado no remunerado.
Finalmente señaló que las personas ocupadas pero que no cuentan con ingresos suficientes o prestaciones laborales se dedican principalmente a trabajos de construcción, en el hogar y sector primario como agricultura y ganadería.