Feministas, organizaciones, colectivas y defensoras de derechos humanos abolicionistas de México integradas a la organización "Nosotras Tenemos Otros Datos”.
Realizaron una manifestación afuera de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, para exigir que vote en contra de la legalización de los vientres de alquiler en México.
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Por considerar que avala la explotación de los cuerpos de las mujeres y mercantiliza a los menores y ello los convirteconvierte en cómplices de trata.
La Corte discutirá este lunes en tema, por lo que más de mil 100 organizaciones de todo el país entregaron un documento en el que piden al Poder Judicial evitar la aprobación de la maternidad subrogada y con ello se pronuncien a favor de los derechos humanos de las personas.
¿A quién beneficia el alquiler de vientres?
Laura Lecuona, integrante de esta organización, advirtió que solo beneficia a las organizaciones internacionales que utilizan a las mujeres para la comercialización de los bebés y Tere Ulloa.
Abundó que la cifra más reciente de organizaciones internacionales, muestran que en el 2018, el comercio de bebés a través del alquiler de vientres dejó una ganancia superior a los 6 mil millones de dólares.
Además que con esta aprobación se alienta en turismo sexual reproductivo:
“Estamos hablando de un negocio que dejó más de 6 mil millones de dólares al año y el fondo de esto es porque la SCJN está mercantilizándo la maternidad, porque está privando de Derechos Humanos a las niñas y niños antes de que sean concebidos".
Tabaso y Sinaloa, estados prohibídos
Tabasco y Sinaloa son los únicos estados del país que cuentan con una legislación sobre el tema, sin embargo cuenta con candados específicos que impiden que personas extranjeras puedan alquilar vientres y eso hace que la cifra de registros de estos casos sean mínimos, lo que no justifica una aprobación a nivel nacional.
Las feministas encabezadas por la abogada Patricia Olamendi, la activista Yndira Sandoval y otras, ingresaron a la SCJN a entregar el documento y solicitar de manera personal que se rechace el alquiler de vientres.