El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), presentará al Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, junto con diversas secretarías del Gobierno federal, una propuesta de resolución al conflicto laboral en el mes de agosto, con lo que estiman, podrían estar en el inicio de la solución de la problemática que viven.
El líder de los electricistas, Martín Esparza, sostuvo junto con parte de la directiva sindical, una reunión en la Secretaría de Gobernación con funcionarios de Hacienda, la CFE, Secretaría de Energía y otras implicadas en la posible solución, en la que se propuso que cada una elaborará una propuesta económica, laboral y social, para resolver el problema generado por la extinción de la Compañía Luz y Fuerza del Centro, en el gobierno de Felipe Calderón.
En la propuesta se proyecta la posibilidad de que parte de los trabajadores puedan integrarse incluso a la CFE, otros reciban la pensión que les corresponde y las familias de quienes perdieron la vida en espera de una respuesta, puedan ser acreedores de los beneficios sociales.
De acuerdo con José Humberto Montes de Oca, Secretario del Exterior de este sindicato, quien estuvo presente en este encuentro, existen las condiciones para que se pueda llegar a una solución en un corto plazo.
Martín Esparza, durante el mitin realizado afuera de la Secretaría de Gobernación, señaló que ante la disposición mostrada para resolver este conflicto, si el Presidente López Obrador se plantea renacionalizar la industria eléctrica, contará con el apoyo de los trabajadores del SME.
La próxima reunión para conjuntar las propuestas de solución que serán entregadas al Presidente está proyectada para el 11 de junio a las 11:00 en la sede de Gobernación.
CASI 12 AÑOS DE LA EXTINCIÓN DE LFC
El 11 de octubre de 2009 el Gobierno federal decretó la extinción de Luz y Fuerza del Centro (LFC), "por no resultar ya conveniente su operación para la economía nacional ni para el interés público".
Al menos 16 mil de los 44 mil trabajadores que estaban activos en esa empresa al momento de ser decretada la extinción se mantuvieron en resistencia tras un año de la medida.
También 28 mil aceptaron su liquidación y más de 22 mil jubilados cobran sus pensiones normalmente, mientras dos facciones se disputaron la titularidad de del contrato colectivo del SME.