Cuando hablamos de la firma española Seat, inmediatamente pensamos en vehículos icónicos como el Ibiza o el León, pero también nos invade la idea de su potencial y su fortaleza en el mundo del motor, misma que se ha forjado a través de los años y no ha sido por otro acto que su constancia y correcta ejecución en el desarrollo de vehículos, pero ahora, ha dado de qué hablar justamente por el tema de su modelo León, el cual ha comenzado con la producción de su variante de gas natural.
Dicha variante llegará para complementar la oferta del modelo en el mercado, sumándose a las variantes ya establecidas de gasolina (TSI), diésel (TDI), híbrido suave (eTSI) e híbrida enchufable (e-Hybrid), echando mano de un motor 1.5 litros de cuatro cilindros que genera 128 Hp y 148 lb-pie de par máximo, asociado a una transmisión manual de seis velocidades o una DSG de siete, con la que trabajando oportunamente, podrá llegar a una velocidad máxima de 203 km/h.
Llegará al mercado con las configuraciones de cinco puertas y SportsTourer y los acabados Style, Xcellence y FR, equipando tres depósitos de GNC de 17.3 kg totales que le brindarán una autonomía estimada de 440 kilómetros, además, se apoyará como reserva de un depósito a gasolina de nueve litros.
Su equipamiento, como es costumbre, se deberá a la versión elegida, sin embargo, desde la versión más accesible, se contemplan elementos como faros LED, Digital Cockpit de serie, sistema de infotainment con pantalla de 8.2 pulgadas y algunos apoyos para conducción como sensores de estacionado y alerta de cambio de carril.
Respecto al consumo del producto, se estima que podrá ofrecer unos 100 km por cada 3.9 a 4.3 kg de Gas Natural Comprimido y sus emisiones de CO2 serán de entre 107 y 118 g/km, datos que han sido evaluados en el ciclo WLTP, hecho que le valdrá la etiqueta Eco que obviamente, le otorgará beneficios fiscales, sin embargo, hasta el momento se desconoce su precio de venta, por lo que habrá que esperar para tener más información.
