El presidente Andrés Manuel López Obrador llamó a la difusión masiva en medios del video que entregó Emilio “L” entre las pruebas de su denuncia ante los presuntos sobornos detrás del caso Odebrecht; "es un asunto de Estado", enfatizó.
"Se debe de conocer toda la denuncia del señor Emilio ‘L’; todos los mexicanos deben saber qué fue lo que denunció. No sé cuál sería el procedimiento a seguir para que la Fiscalía (General de la República o la instancia correspondiente del Poder Judicial informara sobre esta denuncia, desde luego, con todos los implicados, con todo el manejo del dinero, con la entrega de los sobornos".
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López Obrador consideró qué hay que "conocer todo, primero, porque esto es sano, ayuda a purificar la vida pública, nada de ocultar la verdad, transparencia completa, que es una regla de oro de la democracia".
Desde su óptica también las autoridades responsables de torear justicia en el caso tendrían que propiciar que se recupere "todo lo mal habido, que la nación recupere lo que se obtuvo de manera ilegal: extinción de dominio, esto es, devolver lo que se sustrajo, devolverle a la nación todo. Recuperar lo robado, porque eso nos ayuda. No estamos en bonanza y son millones de pesos que deben ser utilizados para beneficio del pueblo”, dijo.
En el caso del juicio a los expresidentes, el primer mandatario reiteró que hay que esperar a una consulta ciudadana.
"Quiero dejar de manifiesto que tiene que ser la gente, tiene que ser el pueblo el que decida sobre este asunto, no quiero que se vaya a pensar que es una venganza, no es mi fuerte la venganza. Por eso, consulta a los ciudadanos y ya conocen mi postura, si se llegara a la consulta, yo votaría en contra de que se les juzgue, pero al mismo tiempo respetaría la decisión mayoritaria de la gente", remarcó.
Por otra parte, ante pregunta expresa, el Jefe del Ejecutivo mexicano, indicó que buscará la cancelación del contrato con la planta Etileno XXI; “ese contrato se tiene que cancelar, es mi opinión, por ser un contrato leonino; se tiene que revisar", apuntó ante el documento firmado en las dos pasadas administraciones federales, con el que se obliga a Petróleos Mexicanos a abastecer con gas barato a la planta operada por Braskem, filial de Odebrecht y la mexicana Idesa.