Este domingo, la Arquidiócesis de México, que encabeza el cardenal Aguiar Retes, llamó a acompañar a los familiares de las personas fallecidas por el Coronavirus, que alcanzaron las 56 mil 543 víctimas mortales este fin de semana.
En el editorial del semanario Desde la Fe, órgano de difusión de la iglesia católica mexicana, se advierte que la muerte "siempre difícil de asimilar", es una experiencia más difícil de conllevar cuando se suman el confinamiento, la inseguridad, el desempleo, la crisis económica o la incertidumbre ante el futuro.
Ya son miles de familias las que "han vivido el trance de la muerte en los últimos cinco meses y todas ellas necesitan tanto de la fuerza de la fe, de la profundidad de la esperanza, como de nuestro abrazo, de nuestro amor y cercanía", enfatizó la Arquidiócesis de México
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Además, se lamenta, la epidemia del COVID-19 también ha afectado las maneras de conllevar un duelo. "No hay abrazos, no hay presencia física, a veces ni velorio, y el consuelo debe caminar hasta por medios virtuales".
Al reconocer los memoriales a los fallecidos por la pandemia que diariamente encabeza el Ejecutivo federal, el semanario destaca que "en la Iglesia también han florecido múltiples estrategias creativas para acompañar espiritualmente a los deudos, y todo con un claro objetivo: proclamar que la última palabra no la tiene ni el dolor ni la muerte, sino la esperanza y la vida".
Por otra parte, al resaltar el papel de la pastoral juvenil, en el Día de la Juventud Católica Mexicana, el arzobispo primado de México, Carlos Aguiar Retes, elevó sus oraciones por muchachas y muchachos "que tanto necesitan de nuestro apoyo para encontrar el camino de la verdad y de la vida".
Desde la misa realizada a puerta cerrada en la Basílica de Guadalupe, el cardenal Aguiar Retes llamó a fortalecer el contacto con "niños, adolescentes y jóvenes; tenemos que atenderlos en todos los ambientes de vida" y hay que "ponerlos en contacto con realidades muy difíciles, pero que nos abren el corazón y nos ayudan a caminar para practicar la misericordia. Debemos ponerlos en conocimiento y en contacto con los necesitados, con los enfermos, con los reclusos, con los indigentes, con los adictos a todo tipo de dependencias esclavizantes".