Este lunes se difundió un video en el que se observa al ex director de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), Tomás Zerón de Lucio, interrogando a una persona identificada como Felipe Rodríguez Salgado, “El Cepillo”, presunto jefe de sicarios del grupo criminal Guerreros Unidos.
En el video, grabado el 15 de enero del año 2015 y del cual MVS Noticias obtuvo una copia, se observa a Zerón de Lucio, hoy prófugo de la justicia, vestido de negro, acompañado de otras personas en un cuarto pequeño, mientras que Rodríguez Salgado se encuentra sentado en una silla, esposado, encapuchado y sin camisa.
Al inicio del interrogatorio, Tomás Zerón le advierte a El Cepillo que a la primera mentira va a cambiar el tono.
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—Tomás Zerón (TZ): Ya valió madres. La primera mamada que me digas y cambiamos el tono, ¿va? ¿sí o no? Ya hemos estado viendo las noticias. Tú dinos cómo quieres que vaya avanzando. Tú no vas a ser la excepción, entonces, no te la pongas difícil.
—Felipe Rodríguez (FR): Vale.
—TZ: Vale. Bueno, vamos a empezar. Dime todo lo que sepas de los estudiantes. La primera mentira que me digas, se acabó el tema y empezamos.
Al iniciar su relato, El Cepillo le comenta a Tomas Zerón que una persona de nombre Ignacio le habló para que se fueran a Iguala porque estaba entrando la gente de color, en alusión a los integrantes del grupo rival de Los Rojos.
— FR: Estábamos ahí.
— TZ: ¿En dónde es ahí?
— FR: En Cocula, en Cocula.
— TZ: ¿Qué día era?
—FR: No recuerdo bien, no recuerdo. Y ya, no, entonces me habló, quería que fuéramos para Iguala, que porque estaba entrando la gente de color.
— Persona no identificada: ¿Los rojos o a quién te refieres?
— FR: Ajá.
—TZ: Habla más fuerte, habla más fuerte. A ver, dime qué tienes. Ponte derecho, dime qué quieres. ¿Quieres una camisa o algo?
— FR: Así estoy bien.
—TZ: Vale, échale.
Cabe mencionar que el gobierno de México ya solicitó la semana pasada a su similar de Canadá la extradición de Tomás Zerón, a quien se acusa de alterar las investigaciones por el caso Ayotzinapa, al ocultar indicios de pruebas, así como por torturar a detenidos para que confesaran su participación en los hechos.