La Fiscalía General de la República (FGR) informó que el pasado 22 de abril la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Seido) inició investigaciones con motivo de una denuncia anónima presentada el mismo día, en la que se mencionaron diversos hechos que pudieran constituir el delito de delincuencia organizada con la finalidad de cometer terrorismo.
El 25 de abril, un juez de control del Centro Nacional de Justicia Especializado en Control de Técnicas de Investigación, Arraigo e Intervención de Comunicaciones, autorizó la realización del cateo en tres domicilios ubicados en San Andrés Cholula, Puebla.
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Los días 25 y 26 de abril, personal ministerial de la FGR, con el apoyo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), realizó los cateos en los que se aseguró, lo siguiente: explosivo conocido como C4, dictaminada así por peritos de la Coordinación General de Servicios Periciales de la Fiscalía; pólvora, esferas conocidas como crisantemos, tres drones, un arma de fuego corta y una larga; tres cargadores, 517 cartuchos de diversos calibres y 100 casquillos también de distintos calibres.
También se aseguraron siete teléfonos celulares y 53 tarjetas SIM; tres equipos de radiocomunicación, tarjetas de circuitos integrados, una caja con pirotecnia, así como cableado y distinta documentación, entre otros objetos.
La sustancia C-4 cuenta con una velocidad de detonación de 24 mil pies por segundo, esto es, de 8 mil metros por segundo, por lo que se considera un alto explosivo para demolición.
En la denuncia anónima se hizo mención que el material encontrado tendría relación con ataques con explosivos ocurridos en el estado de Guanajuato.