Los delitos cometidos contra personal del sector salud deberían ser sancionados hasta con cinco años de cárcel, propusieron integrantes de la bancada del Partido Acción Nacional (PAN) en la Cámara de Diputados.
La presidenta de la Mesa Directiva, Laura Rojas y la presidenta de la Comisión de Justicia en San Lázaro, Pilar Ortega, presentaron una iniciativa para imponer penas de prisión para poner un freno a las crecientes agresiones contra trabajadores de la salud, incluyendo médicos y enfermeras, en el marco de la emergencia nacional por coronavirus.
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Las reformas propuestas al Código Penal Federal, indican que cuando las conductas de discriminación se cometan contra personal del sector salud en periodos de emergencia sanitaria, las sanciones se incrementarán hasta en una tercera parte.
A la pena de hasta cinco años por delitos contra personal del sector salud en el ejercicio de sus funciones o con motivo de las mismas, se sumará la sanción que corresponda por cada conducta delictiva cometida.
Puntualizaron que los cambios a la Ley General de Salud, prevén arresto de hasta 36 horas a quienes realicen o insten a realizar actos de violencia en cualquiera de sus modalidades, contra trabajadores del sector salud.
Las diputadas Rojas Hernández y Ortega Martínez manifestaron que con ello, buscan "blindar" a médicos y enfermeras, ante agresiones como las referidas y aquellas que no ameritan prisión.
Las congresistas urgieron a proteger la seguridad e integridad del personal que está atendiendo a pacientes con COVID-19 y se pronunciaron por establecer agravantes en las penas, en caso de discriminación al personal de salud.
Señalaron que aunado a las agresiones físicas y la discriminación, el personal señalado está siendo víctima de robos, lesiones y amenazas.
Agregaron que en el marco de la pandemia de coronavirus, se tienen reportes de casos de discriminación contra los trabajadores de la salud en 22 estados, encabezados por la Ciudad de México, donde hay 22 quejas por ese tipo de faltas; el Estado de México, con 12; así como Nuevo León y Guanajuato, con cuatro casos cada uno.
El Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (CONAPRED) ha hecho llamados a la ciudadanía para no discriminar ni agredir al personal médico; aunado a que autoridades federales y de otros órdenes de gobierno han dispuesto que personal de seguridad vigile las inmediaciones de instalaciones hospitalarias a fin de resguardar a quienes allí laboran, abundaron.
La Cámara de Diputados también ha hecho énfasis en pedir a la población que evite discriminar, atacar y afectar a quienes están arriesgando su propia salud y vida, para atender a los pacientes con coronavirus, enfatizaron.
Manifestaron que las agresiones señaladas tienen origen en la desinformación, temor e incertidumbre que provoca el coronavirus, por lo que es fundamental proporcionar a la población datos claros, oportunos y fundamentados sobre la enfermedad.