Durante la misa del Domingo de Pascua de la Resurrección del Señor, Francisco Daniel Rivera Sánchez, Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis Primada de México, pidió por el control de la pandemia y por la protección del personal sanitario que trabaja para controlarla.
Durante la celebración realizada a puerta cerrada en la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México, señaló que la gente se siente desvalida en esta situación de emergencia internacional.
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Al hablar de la resurrección de Jesús, el Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis Primada de México, reconoció que la gente se ha vuelto solidaria ante esta situación y ante quienes padecen por esta enfermedad.
Al advertir que se ha anunciado un aumento de la pobreza y el hambre entre la población a raíz del Covid-19, reiteró el llamado a la conciencia y la solidaridad.
El Arzobispado de México aprovechó además la editorial del Semanario Desde la Fe, para llamar a la sociedad a quedarse en casa y mantener la sana distancia.
Al hacer un comparativo con la conmemoración de la Semana Santa, apuntó que el confinamiento sanitario puede asumirse como el "descanso en el sepulcro de Jesús previo a la resurrección"; el distanciamiento social que se plantea para atenuar los efectos de la pandemia puede asemejarse con la paz y el silencio del sepulcro que contemplará la victoria sobre la muerte y los instrumentos y herramientas como cubrebocas y guantes, ¿acaso pueden compararse a los lienzos con que fue envuelto el cuerpo muerto de Jesús, mismos que quedarán en orden y separados luego de su resurrección?", señala la editorial.
De ahí que el calvario de tantos enfermos y la entrega de todo el personal médico exige también el "descanso" y el silencio de quienes podemos colaborar para que pronto llegue la luz de la resurrección, la superación de esta realidad tan tremenda que lograremos en total sintonía con Jesús.